* Los deslindes
Por Gilberto Lavenant
Se le estaba haciendo tarde. Al candidato priísta a la Presidencia Municipal de Tijuana, Carlos Bustamante Anchondo, se le estaba haciendo tarde para deslindarse del controvertido proyecto de la Plaza 11 de Julio.
Había estado tratando de eludir el tema. Pero ni modo, debía tomar una decisión y definir su postura al respecto.
Por fin esta semana lo hizo, al publicar desplegados en los que puntualizó su postura al respecto.
“Puntualiza Carlos Bustamante : Que se respeten las áreas arboladas. Se pronunció contra la tala de árboles en la explanada donde se pretende construir la Plaza 11 de Julio y consideró necesario el que se realice un replanteamiento de la obra, en la que se respeten las áreas ya existentes”.
Para el priísta, no fue fácil deslindarse de este tema y definir una postura. La madre de sus hijos, doña Carolina Aubanel Riedel, es la Presidente del Patronato de la Plaza 11 de Julio. Su hija, Carolina Bustamante Aubanel, su principal promotora de campaña.
Parecería un enfrentamiento, que sus rivales políticos utilizarían en su contra. Definitivamente.
Cuando en el debate organizado por la organización de periodistas denominada Comunicadores de Baja California, que coordinan Juanita Jiménez y Alfredo Martínez Ruiz, se tocó el tema de la Plaza 11 de Julio y la tala de árboles, a lo más que se atrevió el candidato priísta fue a puntualizar que el proyecto era del Gobierno del Estado y del gobierno municipal. Pero hasta ahí.
A poco más de la mitad de su campaña, no tuvo otra que deslindarse, antes de que sea demasiado tarde o para evitar incomodidades. La definición fué prácticamente en contra del proyecto.
Un proyecto sumamente ambicioso, definitivamente, pero que ha generado enormes controversias y el candidato priísta no podía seguir eludiendo el tema. No faltó quien le dijera que era simplemente grilla de unos cuantos, bajo el pretexto de que se estaban talando árboles, de manera absurda, cuando que Tijuana requiere de muchas áreas verdes.
Pero también seguramente hubo quien le explicó que el proyecto tiene muchas fallas técnicas, que los creadores de esta idea no han reconocido y que obviamente no pretenden corregir. Es proyecto, pero el propósito es hacerlo “a chaleco” o por capricho.
Seguramente don Carlos no quería un enfrentamiento con doña Carolina, pero ni modo, tuvo que hacerlo.
Ya habrá tiempo de tocar ampliamente lo relativo a las críticas en torno a este proyecto.
En principio cabe observar que aunque valioso, a primera vista, no parece justificarse de todo, más que su creación, el que se hayan pasado por alto disposiciones jurídicas elementales, como el Plan de Desarrollo Municipal, o la legislación en materia de construcción y obra pública.
Así mismo, resulta ilógico, pretender meter en la zona ese proyecto, como un zapato con calzador, cuando que existen extensas zonas a lo largo de la canalización del RíoTijuana, que están baldías, en las que no es necesario afectar a nadie, donde se puede planear, proyectar y realizar obras con cierta comodidad y que además requieren de obras como ésta, que impulsen su desarrollo.
El asunto no es de unos arbolitos. Es mucho más que eso.
Por lo pronto, el candidato priísta ya se deslindó o definió su postura al respecto. Otros como el candidato del PT-Convergencia, Alberto Entebi y el del Partido Estatal de Baja California, Marco Antonio Franco Gastélum, por comodidad y conveniencia, ya se habían pronunciado en contra del proyecto.
Por su parte, el candidato panista, Carlitos Torres Torres, no puede ir en contra del proyecto de la Plaza 11 de Julio. Es una idea de sus padrinos políticos, el Gobernador Osuna Millán y el Alcalde Jorge Ramos y no puede deslindarse de ellos.
gil_lavenant@hotmail.com
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