Por Alfredo Calva
Ninguna autoridad actúa ante la indolente omisión de los responsables del Instituto Nacional de Migración, y de su jefe inmediato el subsecretario de Población, Argelia Vargas Fosado y Humberto Roque Villanueva, respectivamente, continúa sin recato alguno y el arribo de extranjeros a Tijuana en busca de asilo político en el vecino país es permanente, generando ya serios problemas a las autoridades locales y estatales, para su control y atención de las personas.