Pepenadores protestan contra la prepotencia de alcalde de Mexicali

MEXICALI.- Hoy no hubo pepena en el relleno sanitario de Mexicali, en el Hipólito Rentería. Todos los pepenadores, los recicladores de los deshechos de esta ciudad, caracterizada por las más altas temperaturas en el país, se fueron a escudriñar de oficina en oficina, como le hacen en el basurero, a ver si en algún lado encontraban alguna joya perdida, algo que valiera la pena entre los funcionarios insensibles que pretenden dejarlos sin su fuente de trabajo.
Entre los diputados o en el gobierno del estado que les ayudara en su demanda de respeto a su derecho a ganar la tortilla con su esfuerzo. Trescientos de ellos marcharon organizados en el Movimiento Antorchista del Congreso del Estado al Palacio de Gobierno, y de éste hacia la Presidencia Municipal, en donde levantaron su campamento, donde vivirán las 24 horas diarias hasta que se les garantice que con la privatización del basurero de la ciudad no se quedaran en el desempleo y en la indefensión.
En el Congreso los recibió el diputado que preside la Comisión Permanente en este momento, Juan Manuel Gastélum; en el Palacio de Gobierno Luis Alfonso Vizcarra, Subsecretario de Gobierno en Mexicali, pero en la Presidencia Municipal, donde tienen la capacidad de resolver el problema, nadie los atendió. El Congreso del Estado hizo un exhorto al Presidente Rodolfo Valdez, para que suspenda la licitación para privatizar el relleno sanitario hasta que se garantice su fuente de trabajo a pepenadores y trabajadores sindicalizados. El Subsecretario de Gobierno ofreció gestionar una reunión con el Presidente y el Secretario del Ayuntamiento para buscar una solución al problema. Sin embargo, como no vieron nada allí donde está la solución al problema, en la presidencia, los pepenadores levantaron un refugio para que les sirva de cocina en las afueras del edificio, mientras que en el patio central tendían colchonetas, cobijas, sabanitas o cartones para esta que será su primera noche en plantón. Ignacio Acosta y Ricardo Mendoza, líderes estatal y municipal del Movimiento Antorchista, respectivamente, los arengaron recordándoles que cuando “Antorcha inicia una lucha, nadie se raja hasta obtener la victoria”. Los pepenadores respondieron gritando: “De norte a sur, de este a oeste, ganaremos esta lucha cueste lo que cueste”.