COLUMNA: Palco de Prensa

* El primer encuentro
Por Gilberto Lavenant
Pues por fin llegó la hora y se dió el primer encuentro entre los candidatos a Alcalde de Tijuana, el empresario Carlos Bustamante Anchondo y el panista Carlos Torres Torres. Se acabaron las especulaciones y se definen las expectativas.

Este fue organizado por Canacintra y en un salón del edificio de dicha organización, de la que Bustamante llamó su casa, pues fue fundador de la misma, Presidente y a nivel nacional llegó a ocupar la vicepresidencia.

Cada quien, según sus preferencias partidistas, puede opinar lo que quiere y decir lo que a su interés convenga, pero lo cierto es que fue un encuentro desigual, pues los temas básicos del debate fueron relativos a cuestiones económicas y en ese terreno, definitivamente, Bustamante se lleva de calle a Carlitos. Como ocurrió.

Pero no se crean que todo fue hablar de empleos y empresas. El candidato priísta sorprendió a muchos, pues abandonó su aparente y tradicional pasividad, y soltó toda su agresividad y sarcasmo, ante un jóven panista que no sintió lo duro, sino lo tupido.

Y debe entenderse de esta manera : Carlitos Torres Torres carga con las culpas que le corresponden de ser representante del partido en el poder. Un partido que ha propiciado y tolerado o solapado todo tipo de desviaciones, corruptelas, cinismos, corrupción en general.

Ni modo que diga que no es cierto. Y aunque lo niegue, las voces populares señalan que el PAN es como el nuevo PRI. Quizás incluso hasta un poco más de lo malo que era el priísmo.

Carlitos, manejó su discurso básico, el que se tenía bien aprendido. El discurso político tradicional, a base de plantear expectativas maravillosas, basadas en la unidad y el esfuerzo conjunto, en el entendimiento, la coordinación y la lucha común.

No se esperaba que el candidato priísta lo fuese a agredir como lo hizo. Le echó en cara ser el candidato impuesto del Presidente Calderón, las versiones relativas a la corrupción en el gobierno municipal de Tijuana, el amiguismo, el nepotismo y todos los ismos que se han dado en las administraciones panistas.

Carlitos, basó su discurso en los supuestos logros de los gobiernos panistas, como lo es la tan cacareada depuración de la coporación policiaca, las obras del PIRE, la coordinación en el combate al crimen organizado, sus relaciones con el gobierno federal para lograr apoyos.

Presumió de conocer la tramitología para la obtención de recursos, e incluso le ofreció al priísta darle la información correspondiente, para que supiera cómo hacerlo.

Bustamante le dijo que no necesitaba ser amiguito del Presidente para obtener los recursos para las obras y programas que requiere Tijuana, que tampoco necesita acudir a la Secretaria de Hacienda o a la de Economía para ello, que cuenta con la mayoría priísta en la legislatura federal, que es donde se asignan los recursos.

Carlitos Torres Torres, hacia como que no iban para él las directas e indirectas del candidato priísta. Como dicen por ahí, se salía por la tangente. Evadió responder, no tanto porque le faltaran ganas para agarrar a golpes a su rival, sino porque evidentemente no tuvo respuestas convincentes y contundentes, para decir todo lo contrario.

Aunque también iba preparado para agredir al contrario. Dos fueron las agresiones más notorias de Carlitos hacia don Carlos. En una le cuestionó sobre el número de policías que habían despedido durante la administración priísta, y aunque no lo dijo, se refirió a la de Hank Rhon. El propio Carlitos contestó y dijo que ninguno, para luego agregar que en la actual administración panista han despedido 400 policías que laboraban para los delincuentes y que de ser Alcalde, continuará con la depuración policiaca.

La otra “pedrada” fue cuando cuestionó a Bustamante si es que estaba en la lista del FOBAPROA e incluso le indicó el número bajo el cual se localiza en la lista de deudores de banca SERFIN. Bustamante respondió que era cierto, que al igual que otras personas en la crisis de 1995 tuvo pérdidas, pero que sigue invirtiendo.

Llamó la atención que cuando se tocó el tema relativo a la promoción de nuevas inversiones, en tanto que Carlitos daba su discurso, Bustamante comentaba, con una sonrisa de oreja a oreja, “…esa está fácil. Yo si sé como traer inversiones”.

¿Quién ganó el debate ?, pues cada quien, según su interés o preferencia partidista, le dió el gane al candidato de sus preferencias personales. Cabe observar que Bustamante llegó tranquilo y salió feliz. Sonriente. En cambio, Carlitos, llegó aparentemente tranquilo, pero salió sumamente preocupado. Aunque su equipo publica al día siguiente y en su página de internet, que ganó.

Cabe observar otros detalles adicionales de este encuentro. El moderador, el presentador de noticias en televisión, Luis Eduardo Cantúa, sorprendido por la gritería de las porras de los candidatos, afuera del edificio de Canacintra, comentó que todos pensaban que las contiendas no iban a prender.

En la parte frontal del acceso al evento, irónicamente se instalaron vehículos blindados, en exhibición, como prueba seguramente del estado de inseguridad que se vive en Tijuana.

La última : los organizadores exageraron en las restricciones para el ingreso al evento. Guardias privados, sin criterio. Parecía un evento elitista. Y afuera, el caos total con las porras de los candidatos. Ni un solo policía para mantener el orden.
gil_lavenant@hotmail.com