“VerEdicto”

La corrompida vida política
Por Isaac Torres

Tijuana.- Los políticos no tienen amigos, tienen intereses.
Cada que uno de los integrantes de los partidos políticos buscan alguna posición, ya sea por compadrazgo o de elección popular, se desviven tratando de sumar adeptos diciéndose “amigo” de todo aquel al que saben podrán sacarle provecho para satisfacer sus ambiciones personales.
Para ellos, mejor que crear afectos es crear intereses, como lo dijo Benavente, y para lograr su fin se basan en su labia, en los arlequines que los rodean para “conquistar” a sus objetivos a quienes invitan a participar a su disoluta, libertina, licenciosa, depravada, viciosa, desenfrenada, inmoral y corrompida vida pública y privada.
Haciendo una analogía entre los personajes que desenfrenadamente buscan de una u otra manera “vivir del presupuesto”, con los que participan en la obra “La Historia sin fin”, del alemán Ende, los “políticos” y vividores de la política, personifican a Bastián protagonista principal de dicha obra, de la cual el siguiente es un extracto:
La mayoría de la acción ocurre en el reino de Fantasía, un mundo que está bajo amenaza de ser destruido por la Nada (la cual representa la carencia de imaginación de la gente del mundo real) l
Bastián, al igual que en La Historia sin fin (¿y que los políticos?), se quedan sin madre…
El personaje principal entra al universo de Fantasía. La Emperatriz Infantil le encarga crear un nuevo mundo a partir de su imaginación y sus deseos. Para ello, le hace entrega del medallón Áuryn, el símbolo de la Emperatriz en persona, que le dará el poder de la creación sin límites.
Así, con el poder del amuleto, Bastián empezará a pedir un deseo tras otro y verlos cumplirse ante sus ojos.
Inicialmente, él trata de deshacerse de todas las debilidades que le han atormentado en su vida anterior.
Él quiere ser fuerte, valiente, sabio y vivir muchas aventuras. Pero la Emperatriz no le advierte a Bastián que con cada deseo que pida, perderá un recuerdo de su vida pasada….
El muchacho, confundido por una hechicera llamada Xayide, tiene cada vez más ambición de poder, y eventualmente tratará de derrocar a la Emperatriz Infantil como soberana de Fantasía, provocando guerra, desolación y caos.
Así, los vividores de la política desean que la suya sea una historia que nunca termine… para lo cual pisotean la dignidad de quien se les ponga enfrente, compran la “conciencia” de algunos de los comunicadores y de los que ya no necesitan, simplemente pierden el recuerdo de los mismos.
Más de uno querrá saber de nombres, pero a todos, o casi todos, de los que viven de la política y de los políticos, los conocemos y sabemos quiénes son. Por eso, esas personas no tienen amigos, tienen intereses.