sábado, 27 de marzo de 2010

COLUMNA: Palco de Prensa

* Elección de Estado
Por Gilberto Lavenant

Los priístas se quejan y señalan que la de este año, en Baja California, y en especial en Tijuana, será una Elección de Estado.

¿ Que significa esto ?, pues que la contienda no va a ser pareja. No será una lucha de partido contra partido. Que el PAN tendrá como manejador, promotor y en ocasiones hasta de suplente de sus candidatos, a funcionarios de los tres niveles de gobierno.

Lo mismo decian los panistas, cuando eran oposición. Y lo criticaban fuertemente. Pero se quedaban con el coraje, con la frustración, con la derrota electoral, sufrida por la desventaja.

Así es que no le extrañe a nadie que curiosamente en estos días se han intensificado las actividades de los programas sociales de los tres niveles de gobierno. El obeso Carlitos Reynoso, Secretario de Desarrollo Social del gobierno estatal, anda muy atareado recorriendo colonias, llevando ayuda oficial a los colonos y potenciales electores.

Hasta el Alcalde Jorge Ramos anda en la siembra, para que luego los candidatos de su partido tengan una buena “pizca” de votos el día de los comicios, el próximo 4 de julio.

Esto de la “elección de Estado”, también lo dicen los propios panistas, aunque de manera diferente. En principio, y debido a los tiempos, le llaman imposición. Se quejan –anónimamente- que en estas elecciones están metiendo las manos el Presidente Felipe Calderón, el Gobernador José Guadalupe Osuna Millán, el Secretario General de Gobierno Francisco Blake y el Alcalde de Tijuana Jorge Ramos. Todos con un mismo fin : imponer como candidato panista a Alcalde al jóven Carlos Torres Torres.

Esto se denota con las mantas que han sido colocadas en lugares estratégicos de la ciudad, igual que hacen con los narcomensajes, en donde invitan a los panistas a lanzarse en contra de la imposición de Torres Torres e incluso los alientan a denunciar los hechos por la via penal.

¿ Habrá algún panista que esté dispuesto a denunciar penalmente a cualesquiera de los citados cuatro personajes, por la presunta comisión de delitos electorales ?, difícilmente. Casi imposible. Al menos no abiertamente, por temor a las represalias.

Pero no hay duda alguna de que se está desarrollando una “elección de Estado”. Los “simpatizantes” de Carlitos, llegan en “bonches”, evudentemente atendiendo líneas o instrucciones superiores. Algunos bajo la amenaza de despido y otros ante la oferta de mejores posiciones de trabajo.

No se cree eso de que llegan, se arriman o se suman a Carlitos, porque efectivamente de pronto se percataron que es el mejor hombre para gobernar Tijuana. Habría que advertir que si realmente no hay más, entonces el PAN anda falta de recursos humanos. No se explica de otra manera.

Esto también se observa en el trato que se da a los tres pre-candidatos panistas a la Alcaldía de Tijuana, en varios de los medios de difusión. La proyección preferente hacia Carlitos, es obvia e inocultable. Además, sin crítica alguna. Nada más eso faltaba.

De pronto, Carlitos es el elocuente, el contundente, el iluminado, el que proyecta mejor imágen. Por el contrario, a Monraz lo mandan al último sitio de preferencias, incluso más abajo que a Javier Castañeda. Hay que “bajarle los humos” a Alejandro, dicen por ahí.

Curiosamente, ni los propios panistas dicen nada respecto a la notoria desventaja en cuanto a manejo de recursos económicos. Monraz y Castañeda se han visto modestos. En cambio Carlitos no ha escatimado en gastos publicitarios y de todo tipo.

Por algo dicen que es el candidato oficial, que es el candidato del Presidente Calderón. Esto avalado o respaldado por el Gobernador Osuna Millán y por el Alcalde Ramos. Este último se sumó en el último momento, al no soportar las presiones de allá arriba. O bien, la oferta para ello fue muy buena.

Solo queda un último recurso o instancia para ver si la imposición se hizo efectiva o se quedó en meras intenciones. La convención panista de elecciones internas, el próximo 11 de abril. Por algo en las mantas se advierte a los panistas que digan que si, que al cabo el voto es secreto.

Mientras tanto, a hacer gala de hipocresías. Todos juntos, como un solo hombre. Sonrientespara la foto. Las patadas a las espinillas y los golpes bajos, que sean lo más disimulados posibles. Ni modo, así es la política.
gil_lavenant@hotmail.com

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