COLUMNA: Expediente Político

* Un congreso perfectible

Por Alfredo Calva

Aceptar las equivocaciones, es una demostración natural en funcionarios que tienen la convicción de servir y ser útiles a sus conciudadanos, es una prueba, de que su actividad es perfectible y que buscan a través de las experiencias que generan sus acciones, hacer bien su trabajo, y lograr con ello, el resultado y metas deseadas.

De esta forma es como los integrantes de la XX legislatura local, han asimilado y han actuado en el conflicto que se genero a raíz de la aprobación que hicieron a las reformas a la ley de alcoholes, en especial a lo referente a los horarios de operación de los sitios que expenden bebidas con graduación etílica en embase abierto, que desprendió el malestar de los cinco ediles en la entidad, en especial, de aquellos cuya demarcaciones se consideran con vocación turística.

De acuerdo a lo manejado en los diversos medios de comunicación, los alcaldes de Tijuana, Playas de Rosarito y Ensenada, se encuentran molestos con los diputados por la aprobación al vapor, dicen ellos, de las reformas antes citadas, por la falta de consenso entre los empresarios del ramo y ellos mismos, medida, señalan que, repercutirá seriamente en la economía del sector.

A estas opiniones de los empresarios del sector ¨congalero¨ y de los ediles ignorados, se suma la opinión del ejecutivo del estado, quien por cierto, ni tardo ni perezoso, al menos no, como en otras ocasiones, publico de inmediato las reformas aprobadas, con las que, ha manifestado, estar completamente de acuerdo, y que apoyara hasta las últimas consecuencias para que no retornen a su estatus original.

Ante toda esta guerra mediática, la presidenta del Congreso del Estado, Nancy Sánchez, en conferencia de prensa, reconoció la perfectibilidad de la ley de alcoholes y por ende, la posibilidad de revisión de las reformas aprobadas, bajo el esquema de consulta a los empresarios del sector, alcaldes, pero también, al sector más trascedente e importante para cualquier ley o reforma de ley, la población en general, y en ese tenor, se vislumbra casi imposible que, se dé marcha atrás las reformas.

Por lo que respecta a la eliminación parcial, esto por la gracia y obra del gobernador, al cobro de la tenencia vehicular, no pagan el impuesto aquellas unidades cuyo valor no supere los 260 mil pesos, sin iva, la molestia que ha causado el impuesto desmedido a los automotores que superan la cantidad establecida, pero que por regla se han considerado como de trabajo, específicamente los pick ups, ha provocado en los ciudadanos un profundo resquemor hacia los funcionarios de elección, tanto a los diputados, como al ejecutivo estatal.

Sin embargo, aunque no lo han expresado públicamente la presidenta del Congreso, Nancy Sánchez, y el coordinador de la bancada del PRI en la cámara legislativa, Julio Felipe García, pero si, entre el resto de las fuerzas correligionarias del poder legislativo, este problema tiene una muy sencilla y fácil solución, que el gobernador ordene a los diputados de su partido, y asociados, PAN, PANAL y PRD, que voten a favor de la eliminación total del pago de tenencia vehicular, y así, todos los ciudadanos saldrán beneficiados y se cumplirá con el espíritu de la ley.

La decisión ya está, en manos de José Guadalupe Osuna Millán, gobernador de Baja California.