TIJUANA.- Por su enorme esfuerzo de poner en la cima del Everest el nombre de Tijuana, el alpinista Ignacio Anaya Barriguete recibió hoy de manos del presidente municipal Jorge Ramos las llaves de la ciudad.
“Más que las herramientas materiales fueron los valores de tu familia, y el amor por Tijuana los que te permitieron lograr la hazaña en la montaña más alta del mundo”, mencionó el presidente.
Felicitó a Ignacio por lograr su objetivo, por superar todos los obstáculos que estuvieron por delante antes de llegar hasta la cima, y que fue posible gracias al apoyo incondicional de su esposa Ana Luz Rábago y de su pequeño hijo Luis Carlos.
Destacó que hombres y mujeres tijuanenses como el alpinista Ignacio Anaya, son los que en estos momentos requiere Tijuana para alcanzar la verdadera imagen de lo que somos quienes vivimos en esta ciudad fronteriza.
“Desde aquella reunión que sostuvimos antes de partir al Everest supe que volvería a mi tierra para compartir con todos ustedes la dicha que sentí en la cima de la montaña. Siempre llevé conmigo sus ánimos y apoyo recibidos”, refirió Ignacio.
Anaya Barriguete nació en la Ciudad de México, Distrito Federal, el 4 de noviembre de 1967. Radica en Tijuana desde 1974, y es egresado de las licenciaturas de contaduría pública y de derecho por la Universidad Autónoma de Baja California; desde hace tres años combina su actividad profesional con el alpinismo.
Entre sus ascensos sobresalen dos veces el Aconcagua de Argentina, de seis mil 962 metros de altura; una vez el Chimborazo de Ecuador, de seis mil 310 metros; tres veces el Pico de Orizaba de México, de cinco mil 750 metros.
También tres veces el Whitney Mountain de Estados Unidos, de cuatro mil 417 metros; una vez el Elbrus de Rusia, de cinco mil 642 metros; una vez el Wheeler Peak de Estados Unidos, de cuatro mil 411 metros y dos veces el Picacho del Diablo de Baja California, de tres mil 96 metros de altura.
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