Hace dos años, la selección juvenil femenil de Bulgaria se encontraba en el Centro de Alto Rendimiento de Baja California participando en el Mundial de Dicha categoría.
En ese grupo destacaban jugadoras como Vesela Goncheva, Tsvetelina Nikolova, Elitsa Vasileva y Victoria Grigorova, quienes llevaron de la mano del entrenador Stoyan Gunchev al equipo búlgaro hasta las semifinales.
La escuadra eslava terminó en la cuarta posición del torneo, perdiendo en la fase de eliminación por las medallas, sólo ante Alemania por el pase a la final, y ante Brasil en la pelea por el bronce en Mexicali.
Esos dos partidos fueron una noche triste para Vasileva y Nikolova, quienes sin embargo, en dicho mundial lograron una gran proyección hasta convertirse en figuras internacionales y hoy en día son estrellas del voleibol europeo.
Vasileva se convirtió en una de las jugadoras jóvenes con un brillante futuro en la Serie A del Pallavolo Italiano, donde ya conquistó un título. Y ahora han cedido la estafeta y liderato dejado en las selecciones juveniles a jugadoras como Grigorova y Goncheva.
Para las dos atletas búlgaras el hecho de haber visto al cuadro mexicano, evocó buenos recuerdos de aquel mundial en el que convivieron con las aficionadas y con jugadoras de varias selecciones juveniles.
Junto con ellas, los cuadros varoniles también entrenan en una instalación que conserva un aire que recuerda la época de la Guerra Fría o de la antigua cortina de Hierro por las amplias dimensiones con las que cuenta el espacio.
Sin embargo, hoy en día este escenario de práctica cuenta también con un comedor concesionado, un gimnasio particular y una cafetería externa que ofrece servicios a los visitantes. Sin embargo, a los alrededores se mantiene una atmósfera entre rural y urbana que inspira.
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