Por Gilberto Lavenant
Los panistas, integrantes del gabinete presidencial, andan volados. Les dijeron que cualesquiera de ellos –incluso un simple ciudadano- podría ser el sucesor de Felipe Calderón en la Preidencia de la República, y “de volada” se han dedicado a recorrer el país, para muestrearse. Quien quita y se les haga.
Formar parte del grupo de colaboradores del Presidente de la República en turno, ha sido uno de los requisitos básicos para todo aquel que pudiese aspirar a ocupar la primera magistrarura del país. Incluso, en los tiempos de auge del priísmo, la Secretaria de Gobernación resultaba ser el trampolín ideal para de ahí lanzarse por la candidatura presidencial.
Pero los tiempos cambiaron, lo mismo que las costumbres. Hoy, todos los colaboradores del Presidente de México, los de primera línea, pueden llegar a aspirar, aunque ninguno la tiene segura. Lo único que persiste es que el ostentar una Secretaría, dá cierta prioridad y oportunidad para candidatearse a la grande.
Sin embargo, la poca experiencia pública y política de los cercanos colaboradores de Calderón –ahí tienen a Blake Mora, Secretario de Gobernación, que era un total desconocido al momento de su designación- los deja en desventaja frente a políticos de otras filiaciones partidista, en una contienda presidencial.
A esto se agrega, evidentemente, la poca libertad que el propio Calderón les ha dado para que muestren sus posibles cualidades. Hasta hace poco, cuando ya está por iniciar el proceso electoral hacia el 2012, les dió la oportunidad de recorrer el país a muestrearse. Casi todos son desconocidos. Si acaso Santiago Creel, Senador y exprecandidato presidencial y Josefina Vázquez Mota, coordinadora de la bancada panista en la Cámara de Diputados Federales, además de exSecretaria de Educación Pública, tienen un poco más de tablas a nivel nacional. Los demás, solo en sus casas los conocen.
Estos les ha llevado a recorrer el territorio nacional, bajo cualquier pretexto. Inventan cualquier cosa para justificar sus destinos. No hay obras qué inaugurar, así es que visitan zonas de desastres naturales o puntos donde arrancan programas oficiales. De pronto les surgió el interés por conocer México y han hecho suyo el programa turístico de “Sé turista en tu Estado”, o en tu país.
Lógicamente, esto no podía pasar desapercibido. Después de todo, ha sido sumamente notorio. La República Mexicana ha sido, para los aspirantes panistas, algo así como una pasarela. Se tienen qué programar, para no coincidir en un mismo tiempo en la misma zona.
El periódico capitalino Reforma, en su edifición de ayer lunes 25 de abril, observa las actividades de los “volados” panistas. De entrada señala que “…los precandidatos del PAN a la Pressidencia andan desatados : en los últimos meses intensificaron sus giras de trabajo por los estados”.
Así mismo, indica que quien encabeza la lista es Alonso Lujambio, Secretario de Educación Pública y refiere que de enero a abril ha realizado 28 giras por 18 Estados de la República, en los que ha combinado asuntos oficiales con actividades de proselitismo político.
Y si bien es cierto que el recorrido nacional de Lujambio en el 2010, fue intenso, pues realizó 34 giras en 19 estados, en este 2011, apenas en cuatro meses, ya casi superó lo del año anterior en “horas vuelo”.
También señala que Lujambio supera a Javier Lozano, Secretario de Trabajo, con apenas 14 giras en 11 entidades, y al Secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, con solo 5 giras en igual número de entidades,
Quien sigue de cercas a Lujambio, lo es Josefina Vázquez Mota, coordinadora de la bancada panista en la legislatura federal, con 22 giras en 13 estados, seguido por Santiago Creel, con 21 giras en 14 entidades.
El hecho de que los aspirantes panistas a la Presidencia de la República, recorran el país, de un lado a otro, no fortalece para nada sus aspiraciones. Todos, por igual, siguen siendo igual de desconocidos. Si acaso unos un poco menos que otros, pero al final de cuentas no pintan para una presidencial. No cabe duda que la “caballada” panista, está flaca. Sumamente flaca.
Lo que tampoco ha pasado desapercibido, es que las actividades proselitistas de los aspirantes panistas, han sido a costa del erario público, pues todas sus giras las visten de carácter oficial. Y, conste, no viajan solos. Auxiliares y guaruras, todos, cobran en la nómina oficial de la dependencia de gobierno que encabezan.
Si de perdida tuvieran la decencia de renunciar a sus respectivos cargos y cubrieran sus viajes con sus recursos personales. Así, cualquiera es presidenciable.
gil_lavenants@hotmail.com
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