Palco de Prensa: Las inconsciencias

Por Gilberto Lavenant

Por regla general, cuando se maneja dinero propio, se procura ser metódico, sistemático, austero, tacaño pues, para que mejor entiendan. Se trata de ser el mejor administrador del mundo, gastando a conciencia, cada centavo, para sacarle el mayor jugo posible a los escasos recursos disponibles. Sobre todo, sabiendo lo difícil que resulta ganarlos.

Pero cuando se manejan dineros ajenos, especialmente en la función pública, ocurre todo lo contrario, se gasta a manos llenas, se es generoso, negligente, se firma todo, sin fijarse en “las letras chiquitas”, actúan como si fuesen billonarios, gastan a su antojo, son inconscientes. Saben perfectamente que los dineros son escasos, pero también saben que para “componer” las cosas, simple y sencillamente incrementan precios de los servicios públicos, o los impuestos. Sencillo.

En el caso de los dineros propios, si se incurre en derroches, pues es problema de cada quien. Ni modo de obligar a alguien a que no gaste lo poco que tiene o que no se endeude. Allá él, en su salud lo hallará.

El problema serio, es el de los funcionarios públicos derrochadores, que viven al día, que hacen todo lo posible para lucirse, que realizan obras de relumbrón, para dejar huella de su gestión administrativa, aunque para ello contraigan deudas millonarias. Total, los responsables de cubrirlas o pagarlas, serán las siguientes administraciones y a ellos el lucimiento nadie se los quita.

Tienen por ahí el caso del dirigente nacional del PRI, Humberto Moreira, que le podría costar su carrera política, pues siendo Gobernador del Estado de Coahuila, recibió la administración con adeudos por unos 300 millones de pesos, y a los cinco años deja el cargo, con adeudos por más de 30 mil millones de pesos. No, si para gastar, siendo dinero ajeno, cualquiera es gastalón.

A propósito de gastalones, en Tijuana “no tocan mal las rancheras”. Los alcaldes Jorge Hank Rhon y Jorge Ramos Hernández, los dos jorges, uno priísta y otro panista, no se midieron y cavaron la tumba financiera del gobierno municipal. Una tumba tan profunda, que será difícil que salga de la misma, en los próximos 30 o 40 años.

En el caso del panista, se “lució”, con su famoso Pire, que implicó la pavimentación de importantes vialidades en Tijuana, que definitivamente la transformaron, pero que dejó al ayuntamiento local entrampado en un crédito por unos 1,700 millones de pesos, con una maniobra malévola, consistente en que los pagos a cuenta del mismo, se empezarían a cubrir a partir del primer mes de la gestión de su sucesor, el priísta Carlos Bustamante.

Don Carlos, que durante su campaña pregonó que la suya sería una exitosa administración, debido a su experiencia empresarial, por poco y se cae de espaldas, como cuando se le resbaló la silla en el acto donde anunciaría la designación de Alberto Cappella como Secretario de Seguridad Pública, cuando sus funcionarios del área de finanzas le dijeron que el dinero en caja no alcanzaba para cubrir los gastos de operación del gobierno municipal, más los abonos por el crédito del Pire y otro adeudo heredado de la administración de Hank, así como uno más del panista Jesus González. La filiación partidista, no les diferencia, todos son gastalones e inconscientes.

Resulta que Bustamante sumó los adeudos y conforme al monto, buscó quien lo financiara para hacerlo uno solo, convirtiéndolo en un adeudo por unos 2,560 millones de pesos. Además, repitió la estrategia malévola de su antecesor, Jorge Ramos, pues pactó abonos con incrementos escalonados, de tal forma que quienes llevarán la carga más pesada, serán sus sucesores. No cabe duda que los malos ejemplos cunden.

Por cierto, a propósito de esta reestructuración de los adeudos del ayuntamiento de Tijuana, hace unos días, atendiendo citatorio de la diputada Rosana Soto, Presidente de la Comisión de Hacienda de la Legislatura Estatal, para que se explicara las condiciones de la multicitada reestructuración, acudió el ahora extesorero municipal, Rogelio Viloria, quien no pudo responder a una serie de cuestionamientos. Por ejemplo, no presentó el monto total del adeudo a 25 años, para determinar el alcance del mismo y la viabilidad de su pago por las siguientes administraciones municipales. Viloria, mejor “tiró la toalla”, antes de verse obligado a regresar a explicar lo inexplicable, y sobre todo justificar lo injustificable.

Lo peor, de estas inconsciencias, vino después. El lunes 3 de octubre, como si se tratase de algo de poca importancia, el Alcalde Carlos Bustamante reveló que el ayuntamiento había perdido un reclamo, siendo condenado a pagar 8 mil millones de pesos por un proyecto de videocámaras, que se empezó a negociar en la administración de Jesús González, que se pactó por parte de Jorge Hank y que Jorge Ramos no pagó, lo que llevó el pleito al terreno judicial, con las consecuencias ya sabidas.

Y cabe observar que 8 mil millones de pesos, no son cualquier cosa. Representan, aproximádamente, el costo de 6 Pires, que tanto dolores de cabeza ha ocasionado, pero con la diferencia de que en este asunto, no se pavimentó ni siquiera un metro cuadrado.

Aunque el Alcalde aseveró que de los 8 mil millones de pesos, se estaba negociando para pagar solamente 200, en este caso no hubo declaraciones formales, ni aclaraciones, como cuando se evidenció que el adeudo del Pire se elevaría a más de 6 mil millones de pesos, con lo de la reestrcuturación de adeudos.

       

Curiosa o lamentablemente, ni las organizaciones empresariales, ni los colegios de profesionistas, abrieron la boca para hacer algún reclamo al respecto. Quizás piensan que ellos son ajenos al tema. Posiblemente tengan razón, al menos aquellos que tienen su residencia al otro lado de la frontera, o porque han de decir que, como siempre, los “platos rotos” los pagarán los ciudadanos comúnes y corrientes.

Con tales inconsciencias, de los pésimos administradores, aunadas a la inconsciencia de los diversos sectores sociales, económicos y políticos, se observa negro, negrísimo, el futuro de Tijuana. Y todavía, cínicamente, sueñan con futuras posiciones electorales.

gil_lavenants@hotmail.com