“Venimos a solicitar todo su apoyo, estamos en espera de una respuesta por parte de las autoridades, una solución justa, pero si no nos satisfacen queremos contar con su respaldo” manifestaron al Procurador de los Derechos Humanos. Solicitando algunos ser reinstalados en sus trabajos, pues salieron absueltos por un Juez Federal, otros más manifiestan no estar interesados en regresar a la corporación, pues ya han sufrido mucho daño, desean solo la indemnización que les corresponde por ley, y no volver a saber nada de lo que ha pasado. “Tengo dos hijos que de la noche a la mañana dejaron de ver a su padre, cuando todo esto ocurrió se vieron seriamente afectados psicológicamente, quien nos va ayudar con eso, quien nos va a devolver el daño moral y emocional que sufrimos nosotros y nuestras familias” dijeron. Uno mas agregó “Tengo una hija enferma, que debe tener un cuidado especial en su tratamiento, cuando sucedió todo, la quincena que ya habíamos trabajado no llegó, ya estaba todo planeado, tampoco nuestras familias pudieron cobrarla, mi familia tuvo que botear en la calle para atender las necesidades básicas inmediatas”. Otros opinan que para resarcir en algo todo el daño que les causaron en lo personal, esperarían además por parte de las autoridades un reconocimiento público del lamentable error que cometieron con ellos y una disculpa, que aunque quienes lo cometieron admiten ya no están en el poder, les corresponde a los presentes hacerlo, todo esto, para limpiar su imagen dañada socialmente. El Procurador de los Derechos Humanos les ofreció todo su apoyo y solidaridad por lo que han vivido y la situación actual en la que se encuentran, en espera de las primeras negociaciones, la aceptación o rechazo de estas en cada caso, las puertas de la PDH están abiertas para abrir un expediente de queja e iniciar la investigación correspondiente de ser necesario.
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