Los primeros minutos de este día inició el tormento para miles de mexicanos que estaremos invadidos en todos los medios de comunicación por la propaganda política; serán largos y tediosos spots promocionales de todos los candidatos a la Presidencia de la República.
Pero también será el momento propicio para comenzar a ocultar la información trascendental o, en su defecto, puede ser utilizada para dañar a ciertos candidatos que se vean favorecidos por los ciudadanos. Ya empezó el tiempo para que se tenga un nuevo presidente, pero en estos momentos será una de las elecciones más reñidas de todos los tiempos con el aderezo del crimen organizado.
Estados cómo Chihuahua, Durango, Tamaulipas, Veracruz, Guerrero, entre otros se están preparando para comenzar una jornada de elecciones en silencio, donde el crimen organizado tiene la voz de mando. Es un hecho que los estudios realizados en este momento por el IFE y la FEPADE señalan que estos estados que han sido violentados en los últimos años por la delincuencia están condenados a la ausencia de votantes.
Recordemos las declaraciones realizadas por Cocoa Calderón en Michoacán, “el narco metió las manos en las elecciones”; en este espacio lo habíamos adelantado meses antes de que se llegara el día de votar por la gubernatura del estado que los grupos delincuenciales de la Familia y los Caballeros Templarios estaban promoviendo el voto para determinado candidato.
En esta ocasión las redes del narcotráfico han empezado a trabajar en los municipios y estados para crear una especie de estrategia que puede dar al traste con los esfuerzo de las instituciones que fomentan el voto entre la población; esa estrategia es incrementar la lucha entre las células antagónicas del crimen organizado.
De acuerdo con los informes recabados por la PGR y el IFE al entregar las cartas-invitación y empadronamiento de los ciudadanos que apoyarán en las casillas, municipios o ciudades que son acechadas por el crimen organizado, algunas comunidades son vedadas para las autoridades.
Lo que es un hecho que los candidatos a la presidencia del país, no tienen contemplados en sus logísticas visitar zonas como Salvárcar en Ciudad Juárez o San Fernando en Tamaulipas por el temor a que sean emboscados por las células del narcotráfico.
Seguridad, miedo o simplemente falta de tiempo será el pretexto de los candidatos para ir a esos lugares llamados puntos rojos en el mapa electoral del país; entonces es ahí donde los estudios realizados por el IFE y la PGR reconocen que hay lugares en México donde las elecciones y las votaciones serán un fracaso.
Hoy empezaron las campañas, largas campañas, largos spots y largos discursos prometiendo lo que nunca cumplirán. Lo importante en México es dar ese paso para mejorar la democracia, ese paso se llama analizar propuestas y participar en este proceso, la decisión es de usted.
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