Mexicali, Baja Cfa., a 26 de Enero del 2012.
DIP. ROSANA SOTO
Presidenta de la Comisión de Hacienda
DIP.FRANCISCO JAVIER SÁNCHEZ CORONA
Presidente de la Comisión de Derechos Humanos
DIP. CLAUDIA JOSEFINA AGATON MUÑIZ
Presidenta de la Comisión de Comunicación Social y Relaciones Públicas
A LA OPINIÓN PÚBLICA
PRESENTES
La presente carta de denuncia es para dar a conocer un golpe contra la libertad de expresión orquestada desde el Poder Ejecutivo, utilizando recursos públicos para negociar cierres de espacios críticos, que a continuación describo.
Queremos hacer una energética protesta y denuncia como periodistas contra el gobernador José Guadalupe Osuna Millán ya que dos de sus más cercanos colaboradores realizaron la más ruin acción, promoviendo la censura con el uso de dinero público para desplazar, hacer a un lado, el esfuerzo periodístico que se ejercía en Radio Fórmula Mexicali, ubicada en la 1150 de Amplitud Modulada, desde febrero de 2011 y que concluyó el pasado 24 de enero, sin más aviso que una circular pegada en la ventana del estudio.
El coordinador de comunicación social del Gobierno del Estado, Mario Palacios Romero y el asesor del Gobernador Osuna Millán, Raúl Ruiz Castillo, son los personajes que idearon, promovieron y ejecutaron acciones para que Jaime Delgado Gaxiola y Miguel Ángel Hueso, perdieran el trabajo, pero sobre todo, coartara la libertad de expresión en los espacios radiofónicos de Radio Fórmula donde se ejercía periodismo crítico e independiente.
Mario Palacios y Raúl Ruiz, desde que los abajo firmantes llegaran a esos espacios, promovieron y realizaron presiones para boicotearle todo tipo de publicidad para Radio Fórmula Mexicali a pesar de los niveles de audiencia de la estación, eso sí, en el periódico El Informador de Tijuana le canalizaron recursos millonarios sin sustento en la circulación del impreso donde Raúl Ruiz tiene nexos directos, o bien, en Mexicali entregan carretadas de dinero a medios de comunicación que tienen baja audiencia pero que son afines a sus intereses.
Mario Palacios y Raúl Ruiz son traidores a los principios que tanto defendían cuando ejercieron periodismo; gusta de ganarse sus comisiones en las ventas de publicidad que se encuentran al margen de la ley, así fue cuando fue titular del noticiario en MVS, todas estas acciones con funcionarios emanados del PAN, hay muestras fehacientes de esas acciones.
Raúl Ruiz es un personaje muy singular, tras llegar al máximo cargo dentro de los periódicos Healy que editan La Crónica, Frontera y El Imparcial, se cobijo con el gobernador José Guadalupe Osuna Millán mientras era ejecutivo de la firma antes mencionada, a consecuencia de eso, hoy el periódico El Informador, de recién creación y con muy poca circulación, recibe apoyos desorbitados de las arcas públicas administradas por Mario Palacios Romero.
Los dos funcionarios públicos han negociado salidas de colegas de los respectivos medios a cambio de soltar más dinero público y favorecer a medios donde pueden obtener prebendas.
Esta pareja de comunicadores, hoy metidos en la nómina del gobierno, hacen lo que tanto repudiaron en su labor como reporteros o conductores, promover la censura desde el Gobierno del Estado, cosa muy distinta se vive en las oficinas de comunicación del Poder Legislativo y del XX Ayuntamiento donde siempre mostraron pleno respeto al ejercicio del periodismo.
Afirmamos lo anterior porque una vez que lograron sacarnos de Radio Fórmula con esquiroles muy identificados desde el pasado mes de octubre del año anterior, realizaron un encuentro con los directivos de Radio Fórmula y los nuevos socios que vienen de Ciudad Juárez, Chihuahua, donde acordaron la inversión publicitaria del Gobierno del Estado en Radio Fórmula, tanto nacional como local para este 2012, mientras que a nosotros nos negaron incluso entrevistas con el gobernador Osuna Millán y de secretarios de Estado, excepto con quienes llevábamos una relación fraterna y acudían a nuestros espacios en radio.
Mientras en muchos países se ha buscado una nueva forma de gobernar, en Baja California se han asesinado a periodistas sin que haya avance en las investigaciones y hoy somos testigos que igual promueven la censura haciendo a un lado a periodistas que les son incómodos.
Decidimos hacer pública esta carta porque corremos el riesgo de que desde el Gobierno del Estado y con dinero público, sigan con esta política que daña la actividad periodística manipulando a los medios de comunicación desde el Poder para evitar la crítica y desarrollar campañas para que el gobierno en turno siga ocultando los altos niveles de corrupción en todas las áreas, sobre todo en la oficina de Comunicación Social que dirige Raúl Ruiz y Mario Palacios, amenazando de esa manera a la libre expresión y a la misma democracia.
A Mario Palacios y Raúl Ruiz los acusamos de cualquier cosa que pudiera pasarnos en nuestros bienes, patrimonio y familias. De igual forma esperamos que no continúen con esa política sucia y agresiva para que en nuestros actuales trabajos no tengamos problemas de la misma índole.
Estos dos sujetos provocan asco, coraje y mucha impotencia, ya extrañaba que Mario Palacios desconociera al gerente de Radio Fórmula Mexicali, Miguel Ángel Hueso, cuando se iba a negociar la publicidad del Gobierno del Estado para este año, le decía que él ya no era gerente cuando los directivo de la empresa nos decían todo lo contrario, ¿qué sabía Mario Palacios?
Luego cuando vienen los nuevos inversionistas de Radio Fórmula a Mexicali y Mario Palacio los atiende, les abre un espacio con el gobernador Osuna Millán y ya ni siquiera que es de imaginar lo que se trató en esa reunión cuando al día siguiente nos sacan del aire de manera inmediata y sin previo aviso. ¿Qué se movió ahí? probablemente los recursos que se le negaron al grupo que nos cobijó el año pasado, se van a ver reflejados de manera decidida y sin reparos.
Trato que nunca recibimos de su parte mientras estuvimos en la radio, al contrario en un año rechazó agendar una entrevista con el gobernador Osuna Millán.
Por lo anterior, sirva la presente para solicitar que los representantes del Pueblo, de una vez por todas, pongan fin a la discrecionalidad del uso del dinero público utilizado para promover las acciones de gobierno. Es imperante la normatividad en la materia y que, de una u otra manera, se impongan formas claras y trasparentes en la compra de espacios publicitarios de parte de los gobiernos en turno.
Siguiendo con la normatividad actual deja a discreción el uso faccioso de los recursos del Pueblo para quitar periodistas que ejercen una verdadera libertad de expresión en la labor periodística.
Esperamos que el Congreso del Estado haga las siguientes investigaciones: la inversión publicitaria del Gobierno del Estado y sobre todo esta acción de censura orquestada desde el Poder.
Atentamente
Miguel Ángel Hueso Jaime Delgado
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