lunes, 9 de mayo de 2011

Un negocio llamado Bono

* Réplicas de su chamarra y sombrero, bonodólares y hasta rosarios traídos de Italia, se venden entre sus fans mexicanos
MEXICO.- La banda U2 tiene tres conciertos programados en el Estadio Azteca a partir del próximo 11 de mayo, un día después del onomástico del cantante.
Pero la elevada demanda de sus fans no sólo se refleja en la venta de boletos, sino que ellos mismos se han vuelto objeto de artículos de venta.



El cuarteto tiene, en la página oficial, un apartado de ventas de artículos exclusivos para Latinomérica. Pero no sólo se venden playeras, tazas y pines de colección, sino también cualquier clase de mercancía relacionada con las actividades de la banda, y en particular de su vocalista.



Tal es el caso del rosario que Bono porta en varios conciertos, que algunas veces cuelga del micrófono.



Una copia de este rosario es comercializado a través de una página de Internet donde se afirma que este objeto es traído directamente desde Italia. El vendedor asegura que es el mismo que el cantante ha dejado ver en cuatro modelos diferentes entre ellos uno de oro y otro de madera.



O bien el billete de colección “ONE BONODOLLAR”, de edición limitada. Este artículo sirvió de promoción de la película The million dollar hotel (2000), de la que Bono hizo la música y participó en el desarrollo del guión. En el billete aparece el rostro del intérprete.



Famosos y fans de U2



La historia más recordada de la relación de U2 con México fue el incidente cometido por el hijo del entonces presidente del país, Ernesto Zedillo, cuya escolta agredió físicamente a un productor inglés y a un agente de seguridad de la banda.



Pero lo cierto es que a pesar de todo, Paul Hewson, Larry Mullen Jr., David Evans (The Edge) y Adam Clayton aprecian mucho a México.



En retribución, entre los fans de U2 se cuentan a varios famosos.



El productor de Matando Cabos y Salvando al Soldado Pérez, Billy Rovzar, se encuentra ansioso por verlos de nuevo, ya que es un acérrimo fan de la banda desde hace varios años.



“¡Esta semana la estamos nombrando como U2 week, es sagrada!. Estaremos en las tres fechas y estamos emocionadísimos. Creo que el que veremos es el show más espectacular desde Pop Mart (la gira). Ya los ví cinco veces, estuve en Nueva York, en Los Ángeles y en Boston, es un show increíble que ni mandado a hacer para el Estadio Azteca”, dijo en entrevista telefónica.



Mucha gente habla de la candidez y la calidad humana de Bono, pero el productor recordó cómo fue la última vez que convivió con Bono.



“Estuvimos en una convivencia increíble con Jaime Camil, tuvimos una comida en su rancho. Y ver a Bono en la tele, escuchar su música, cambia totalmente cuando lo conoces, te deslumbra la calidad humana: cuando ves a alguien tan grande como él hablar del clima, del pasto, de cómo se comporta cuando no hay cámaras, es algo que te deja con buen sabor de boca”.



Actualmente Rovzar se encuentra dentro de la línea de productores del musical de Broadway, Spiderman, puesta en escena donde The Edge y Bono musicalizan la historia.



“En Spiderman estamos de socios, él está personalmente reescribiendo la música, es también coproductor. Por cosas de trabajo no he podido estar en las juntas que ha tenido con los demás, pero espero pronto estar”.



Bono no tiene precio



No cabe duda que los seguidores del cuarteto harían cualquier cosa por ver a la banda ya que cuando U2 anunció que vendría a Monterrey en el 2006, varios fans viajaron en camión por 15 horas para dirigirse al estadio Tecnológico.



Un fan se gastó 3 mil pesos en pura mercadotecnia, entre ella sudaderas, pósters, playeras, tazas y aseguraba que Bono era todo para él.



Una noche que la banda llegó a un prestigiado hotel de Reforma y al bajarse de la camioneta que los transportaba, Bono se acercó a los fans que estaban afuera del inmueble.



El cantante les decía que guardaran silencio y que estaría con ellos, pero algunos comenzaron a gritar y tratar de acercarse y entonces el equipo de seguridad se llevó a la banda.



El incidente estvo a punto de provocar un escándalo. Al día siguiente Bono se tomó unas cuantas fotos con los fans que lo aguardaban.

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