COLUMNA: Palco de Prensa

* Los sometimientos
Por Gilberto Lavenánt
Tal y como estaba previsto, ayer compareció el Alcalde de Tijuana, don Carlos Bustamante Anchondo, a la Legislatura Estatal, a defender su proyecto de ley de ingresos para el 2011, que ésta semana criticó severamente la diputada priísta, Rosana Elisa Soto Agüero, y aunque el munícipe tijuanense no salió tan bien librado, al menos los legisladores priístas, como que le perdonaron ¨la vida¨.
Los observadores políticos, daban como un hecho, que la legisladora Soto Agüero, como había evidenciado que traía la ¨espada desenvainada¨, pues seguramente haría ver su suerte al Alcalde tijuanense y que incluso en un momento dado, tendría serios roces con Bustamante, pues en su critica de días pasados lo pintó de cuerpo entero como mentiroso y con afanes recaudatorios.

Incluso hubo quienes señalaron que detrás de esa postura agresiva de la legisladora, estaba el Senador priísta, Fernando Castro Trenti, mejor conocido como ¨El diablo¨.

Pero algo pasó, pues los diputados priístas hiceron a un lado su agresividad y no tocaron a Bustamante, ni con el pétalo de una rosa. Lo menos que se dice de ellos, por la actitud asumida, es que hubo negociación, que fueron sometidos.

En cambio, los que se dieron vuelo con los cuestionamientos, fueron los diputados de oposición al PRI. Todos. Les pusieron la mesa los priístas y ellos se sirvieron con la cuchara grande. Bustamante no sentía lo duro, sino lo tupido. El Secretario de Finanzas, Rufo Ibarra, le batalló bastante para justificar los incrementos detectados en la ley de ingresos.

Para fortuna del Alcalde de Tijuana, y de sus colaboradores que le acompañaron, sólo los de la oposición los cuestionaron, en especial sobre alazas en materia del impuesto predial y en el Impuesto Sobre Vías Públicas. Para nadie pasó desapercibido, que los diputados priístas, cuando le tocaba su turno, como en los juegos de mesa, simplemente decían ¨paso sin ver¨.

Quizás para que no se vieran tan mal, una de las aliadas de los priístas, Claudia Josefina Agatón Muñiz, diputada del PT, le dijo a Bustamante, cara a cara, aparentemente a nombre de priístas y asociados : ¨No coincidimos con muchos de los incrementos que usted ha planteado. Hay que buscar opciones que no resulten tan gravosas para los ciudadanos¨.

Pero los panistas no le perdonaron la zarandeada. La diputada María del Rosario Rodríguez Rubio, por ejemplo, le criticó que no se le impongan nuevos tributos a las máaquinas tragamonedas de los casinos, pero que en cambio se haya aumentado el Impuesto Sobre Vías Públicas.
En respuesta a ello, el Secretario de Administración y Finanzas, Rufo Ibarra Batista, indicó que dicho incremento es absolutamente necesario, pues de ahí se recaudarán 41 millones de pesos que servirán para pagar parte de los 300 millones que hay que abonar a lo largo del 2011 por el crédito del PIRE.

Incluso, ante los reiterados cuestionamientos, el funcionario de finanzas pidió el apoyo de los diputados, pues dijo que lo que se pretende recaudar en el 2011, se requiere para enfrentar la difícil situación financiera del municipio y que por lo tanto, "No hay de otra". Casi como suplicando que no eliminen los incrementos detectados.

Agotados los dimes y diretes, se planteó que la Legislatura habrá de valorar las observaciones que hizo el Órgano de Fiscalización del Estado a la Ley de Ingresos 2011, además, como para suavizar o justificar las críticas, señalaron que el compromiso del Congreso para con la ciudadanía, es trabajar en su favor, y que por lo tanto no permitirán ningún aumento que lesione su ya de por si deteriorada economía, especialmente de las personas de escasos recursos económicos.

Cabe observar que en una parte de su exposición, el Alcalde de Tijuana señaló que la administración municipal a su cargo, enfrenta una deuda pública por un monto de dos mil 098 millones de pesos, de los cuales mil 497 corresponden al PIRE, y 568 millones de pesos a otras deudas heredadas. Por algo dicen que no es lo mismo ver los toros desde la barrera, que lanzarse al ruedo a lidiarlos.

De esta comparecencia, resultan varias observaciones :

Que el Alcalde de Tijuana debió entender que no puede gobernar, sin dialogar con los legisladores, sobre todo si se supone que habrán de apoyarlo, tan solo por el hecho de ser del mismo partido.

Que al igual que en todas las actividades humanas, ¨hablando, se entiende la gente¨.

Que el problema de los políticos, como de muchas otras personas, es andar haciendo promesas como candidatos, que luego en la función pública, las olvidan y no solo no las cumplen, sino que actúan en sentido contrario a lo prometido. Como les pasó a los panistas que se comprometieron a eliminar la tenencia vehicular y ahora pugnan porque esta persista, o sea que se siga cobrando.

Que los legisladores deben pensar muy bien lo que han de decir, pues luego se ven pésimos, cuando a la hora de actuar, no pueden sostener sus amenazas y quedan en meras bravatas.

Que los sometimientos, son vergonzosos, como al parecer ocurrió en este caso. Se les vió, como niños regañados.

gil_lavenant@hotmail.com