* Fue víctima de El Kaibil y su banda. Lo plagiaron por orden de El
TIJUANA.-El hombre liberado por el Ejército Mexicano aceptó dar un testimonio de sucautiverio, y aprovechó para hacer un llamado a los padres de familia paraque ofrezcan valores morales a sus hijos, a fin de que no se involucren enhechos delictivos, en alusión a los integrantes de la banda que lo privó dela libertad.
Recordó que el 24 de mayo, varios sujetos que se ostentaron como elementosde la Agencia Federal de Investigación (AFI), lo obligaron a salir de unacaseta de cobro de estacionamiento donde trabaja como despachador, ya que esjubilado del IMSS.En un principio los sujetos le acusaron de haber violado a una joven, quepresuntamente era “hija de un comandante”, pero finalmente revelaron elobjetivo de la privación y le exigieron información sobre sus recursoseconómicos.Varios días después le exigieron datos sobre los propietarios de los prediosaledaños a su vivienda, y ante la evidencia de que no contaba con dinero,decidieron mutilarle el dedo índice de la mano izquierda, el cualsupuestamente enviaron a su familia para presionarla a que pagara unacantidad que él no conoció.Durante los días de cautiverio, fue amenazado de muerte en varias ocasiones,y además sufrió la tortura psicológica ante múltiples amagos de quesecuestrarían a su hijo y a su esposa, y “a mí me dejarían en pedacitos”.Un mes antes del secuestro, la víctima había sido extorsionada pordesconocidos que le hicieron creer que habían privado de la libertad a unode sus hijos, por lo que aceptó depositar 10 mil pesos para su liberación.Sin embargo, al momento de proporcionarles el número del depósito dio unnúmero equivocado, por lo que los extorsionadores no lograron cobrar elrecurso.Sin embargo, ante la evidencia de que su hijo se encontraba libre, dio avisoa la policía y recuperó su dinero.Un mes después, los desconocidos lo privaron de la libertad, y casi 30 díasdespués fue liberado, por lo que dio gracias “a Dios y al Ejército” alsentir que “volví a nacer por la nueva oportunidad de vida”.El hombre, quien dijo ser pensionado del IMSS cuyo pago lo destina casiíntegro a la atención médica suya y de su esposa, pidió a las familiasmexicanas tener mejor control de la educación de sus hijos.“Un mensaje para los hogares de Tijuana y de todo México.Que le den calidadde educación a sus hijos para que no agarren caminos desviados y que laciudadanía no tenga miedo de hacer denuncias anónimas, sobre todo hacerlo alEjército Mexicano”, dijo el hombre.
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