* Los “mugrosos de la campaña” ¿se quedarán fuera?
* El responsable del C-2 asegura que continuará allí “por sus padrinos”
Por Hugo Isaac Rea Torres.
¿CÓMPLICES? - El alcalde electo de Tijuana, Arturo González Cruz, deberá andar con pies de plomo en lo que le resta de funciones a la presente administración municipal, en virtud de las posibles complicidades que pudieran darse entre los equipos de transición de entrega-recepción, ya que hay sinos de viejas amistades entre ellos.
Habrá que recordar solamente que quien encabezó el XXII Ayuntamiento de Tijuana e hizo de éste uno de los peores gobiernos del que se tenga memoria durante los últimos 66 años, Juan Manuel “El Patas” Gastélum Buenrostro, fue secretario de Gobierno en el XVI Ayuntamiento presidido por el hoy gobernador, Kiko Vega, y era quien en las sesiones previas de Cabildo “negociaba” con los regidores de esa administración, entre los que se encontraba el priista que dicen ocupará la Secretaría de Gobierno con Arturo González y será el responsable de la recepción del Ayuntamiento: Carlos Murguía Mejía. Entre ellos también estuvieron el nefasto Juan Manuel Salazar Castro, de muy triste memoria en el Sindicato de Burócratas; Catalino Zavala Márquez y David Saúl Guakil.
Como se recordará, “El Patas” decidió hacer entrega de los recursos materiales, humanos y financieros el próximo lunes 29, dos días antes de lo que marca la Ley, desdeñando la petición hecha por el alcalde entrante el pasado 26 de junio para que se avanzara en el proceso.
En los dos meses que tendrá el equipo de González Cruz para revisar las condiciones en las que recibe el gobierno de Tijuana habrá mucho material periodístico, en virtud de la serie de pifias cometidas por “El Patas” Gastélum en materia de seguridad pública, corrupción, falta de transparencia, complicaciones en términos de movilidad, el desastre del transporte, la asignación de recursos por más de 100 millones de pesos para Relaciones Públicas y para manejo de su imagen a través de comunicación social y sólo 850 mil pesos para prevención del delito, una serie de contratos de arrendamiento que son una clara muestra de corrupción, como los camiones recolectores de basura donde hubo un desfalco superior a los 125 millones de pesos a la Ciudad, o en contratos donde benefició a su hijo y a gente cercana a través de la empresa “Mexikna” con contratos de publicidad notoriamente simulados por montos mensuales hasta de 371,428 pesos, entre otras chuladas. Toda esa podredumbre, o mucha de ella, podría ser soslayada por el coordinador del equipo de transición que recibirá el gobierno municipal: el priista Carlos Murguía Mejía, por lo que queda en el aire la pregunta: ¿cumplirá lealmente con su encomienda?
A ello obedeció la postura del alcalde electo, Arturo González, cuando advirtió:
“Quizás se asustaron con la #Lupa 🔎, quizás esconden algo que no quieren que se descubra, NO cooperaron, NO me extraña, pero bajo la #Lupa de los tijuanenses vamos a revisar TODO y ahora lo haremos con mayor cautela porque la actitud es evidente y el pueblo no es tonto.
Lo dije y lo sostendré siempre, #Cuentas Claras y con #Lupa”.
Por lo pronto, González Cruz deberá aplicar la lupa no sólo a los que se van, sino a los que le “ayudarán” a revisar lo que deja de recursos financieros, materiales y humanos el desaseado gobierno panista que ya se va, ¡por el bien de todos!
MÁS FIFÍS.- Parece ser que el pertenecer al “jet set” tijuanense es garantía de obtener empleo en el nuevo gobierno municipal y estatal, todo porque al priista Carlos Murguía Mejía no le gustaría que las principales dependencias sean ocupadas “por mugrosos que anduvieron en la campaña”.
Ante esa oportunidad, el capitán José Luís Jiménez González, a la sazón encargado de despacho en la dirección de Bomberos, afirma que por jugar golf en el exclusivo Club Campestre nada más y nada menos que con el ex cocinero de “El Diablo” Castro Trenti durante su estadía en Argentina, Marco Pérez, quien hoy funge como secretario particular del alcalde electo, Arturo González Cruz, ya aseguró su nombramiento en la Dirección de la que hoy está encargado.
Como él, también presume que tiene garantizada su continuación como director del Instituto Municipal de Participación Ciudadana el panista Luís García López, hermano del ex diputado local y ex secretario del ex gobernador, Guadalupe Osuna Millán, “El Finito” Max García.
Hay otros más que, apoyando en su aventura de reelección a “El Patas” Gastélum, tuvieron comentarios muy desafortunados en contra del hoy alcalde electo Arturo González. Muchos ya andan presumiendo con sus cercanos que “serán funcionarios de primer nivel”, todo por ser fifís y no "mugrosos", como los califica el priista Carlos Murguía.
Otros fifís más que ni se empolvaron los zapatos en la campaña, por no ser mugrosos como dice el priista Carlos Murguía, dicen estar esperando solamente la toma de posesión del alcalde para empezar a vivir del presupuesto.
¿Será?
¿LEALTAD?- Insisto en que González Cruz deberá andar con mucha cautela porque de quienes se ha rodeado hasta ahora no son precisamente personas con las que haya cultivado una amistad verdadera; es decir, los que se le han acercado son de esos que tienen intereses, no amigos.
Uno de los ejemplos más evidentes es el responsable del Centro de Comando y Control (C-2) Michael Isaac Alcalá Michel, quien fue el responsable de haber filtrado a los medios y redes sociales el video en el que se denuncia la prepotencia del gobernador electo, Jaime Bonilla Valdez, al circular sobre una vía confinada a la Ruta Troncal y haber atropellado a un transeúnte.
Ese señor asegura que sus “padrinos” son Román Aboytes y Felipe Ledesma quienes le ofrecieron continuar en ese cargo de vigilancia y corre la versión de que fue a cambio de una aportación económica para la campaña de Morena.
Versiones, solo versiones.
Hasta aquí la dejamos, no sin antes recomendarles que ¡NO SE ENREDEN Y PUNTO!
Presiona la imagen y...
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