MEXICALI.- Contundente golpe asestó la Policía Estatal Preventiva (PEP) al narcotráfico en la capital del estado, ya que un operativo de la corporación derivado de una denuncia anónima al número 089, culminó con el decomiso de más de una tonelada de marihuana, así como la captura de dos presuntos delincuentes originarios de Navolato, Sinaloa.
Tras recibir informes sobre la posible ubicación en la colonia González Ortega de una casa de seguridad donde integrantes del crimen organizado escondían sustancias prohibidas, los efectivos de la PEP implementaron un operativo estratégico para intentar dar con la droga y posibles delincuentes que estuvieran al resguardo de la misma.
Una vez cercado el perímetro del lugar y con ello evitar posibles vías de escape para los narcotraficantes, los uniformados lograron llegar hasta el predio ubicado entre la calle Santa María y calle Cuarta, el cual coincidía con la información del denunciante.
Debido a lo anterior, los elementos de la Policía Estatal vigilaron el lugar y observaron que se aproximaba una camioneta marca Dakota, Dodge, modelo 83, color azul con gris, la cual era tripulada por un sujeto del sexo masculino.
Una vez intervenido el conductor se identificó con el nombre de Francisco Javier Félix Quevedo, de 30 años de edad, quien traía en la parte posterior de la camioneta 14 paquetes que contenían marihuana.
Posteriormente los agentes estatales revisaron el domicilio al que pretendía entrar Francisco Félix Quevedo, dentro del cual se encontraron decenas de paquetes con el mismo enervante y una persona quien se identificó como Martín Félix Quevedo, de 32 años.
Los hermanos Félix Quevedo dijeron ser originarios de Navolato, Sinaloa, y fueron puestos junto con el vehículo y la droga a disposición del Ministerio Público Federal.
En total se incautaron 112 paquetes con marihuana, los cuales arrojaron un peso de 1 tonelada 195 kilos, con lo que se pudieron haber fabricado 2 millones 391 mil 110 dosis, con valor en el ‘’mercado negro’’ de 47 millones 822 mil 100 pesos.
El lugar donde se encontró la droga quedó al resguardo de la Procuraduría General de la República (PGR), con apoyo de elementos de la PEP y del Ejército Mexicano.
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