lunes, 17 de enero de 2011

COLUMNA: Expediente Político

* De lo oscuro del PRI
Por Alfredo Calva
El pasado sábado los integrantes del consejo político del Partido Revolucionario Institucional (PRI), se reunieron en la ciudad de Tecate para desarrollar una reunión en la que incluyeron a nuevos consejeros, entre los que se destaca el alcalde de Playas de Rosarito, Javier Robles Aguirre.
Asimismo, se designo al nuevo Secretario Técnico de esa entidad en sustitución de Gilberto Hirata Chico, quien se retiro del cargo, y la nominación recayó en esta ocasión en un miembro representante de lo más oscuro de ese partido, René Molina, quien como todo buen convenenciero se deslindo de las fuerzas políticas del zar de las apuestas, Jorge Hank Rhon, para unir esfuerzos con el rival de su antiguo amo, el senador Fernando ¨El Diablo¨ Castro Trenti.

La encomienda que se le otorgo a René Molina, no augura buenos resultados para el tricolor, el cual ya de por sí, se encuentra en una etapa de declive sociopolítico con relación a los reclamos sociales de los ciudadanos de esta entidad, sin la consideración de que, quien traiciona una vez, traiciona siempre.

No han entendido que, el resultado electoral del pasado cuatro de julio, no es garante de que ese partido se encuentra realizando las tareas políticas sociales de forma correcta, el arribo al poder local en los cinco municipios de Baja California, de personajes que abanderaron la causa tricolor, no representan la verdad que se vive en todo el estado, las circunstancias fueron diferentes en cada uno de los municipios, no se puede tipificar el caso de Tijuana, con el de la capital del estado, por solo ejemplificar.

Como botón de muestra solo expondré lo que se vive en los municipios de Tijuana y Playas de Rosarito, en cada uno de ellos, se encuentra una cuota de panistas dentro de la nomina gubernamental municipal, y como plus, diré que, en el caso de Rosarito, la mayoría de las posiciones de importancia se encuentra en manos de priistas tijuanenses, en detrimento a la calidad y capacidad laboral de los tricolores rosaritenses, lo que garantiza, confrontaciones internas por el control y dominio del poder interno del gobierno.

El resultado de estos desaciertos se verán en mediano plazo, los priistas que han sido burlados, que por cierto son la mayoría, en los municipios de Tijuana y Rosarito, cobraran en su oportunidad su factura, con respecto al resto de los municipios, estos guardan conflictos y dinámicas distintas y por ende, estas emergerán en su momento y de igual manera se reflejaran en el ejercicio gubernamental que impactara en la ciudadanía y todos los casos, tendrán sus consecuencias político electorales.

Y si no, al tiempo.

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