Reinstalan a Párroco en Rosarito

PLAYAS DE ROSARITO.- Luego de haber sido suspendido por oficiar misa durante la alerta por la contingencia epidemiológica, el Padre Raymundo Figueroa Pérez fue reinstalado ayer en la Parroquia del Santísimo Sacramento por el mismo Arzobispo de la diócesis Rafael Romo Muñoz.

El padre Ray como le dicen sus feligreses, había sido suspendido por el Arzobispo Rafael Romo Muñoz después de haber desobedecido un circular girado por la diócesis de Tijuana, en donde se instaba a no oficiar misa en prevención de la influenza.
Sin embargo, fueron los propios parroquianos los que le suplicaron al padre que oficiara misa, precisamente para pedir por el fin de esta amenaza de salud, lo que derivó en la suspensión del sacerdote.
Pero tuvieron más influencia las oraciones y las manifestaciones que comenzaron a hacer los miembros de la comunidad católica desde la semana pasada, pidiendo por la reinstalación del párroco.
La situación se puso más complicada a partir de que feligreses impidieron la entrada al nuevo párroco designado por el obispado en sustitución del padre Raymundo, llegando al extremo de cerrar con candado las puertas del templo.
Fue entonces que el arzobispo Rafael Romo Muñoz accedió a la petición de los feligreses, no sin antes darles una buena reprimenda y exhortarlos a profundizar sobre lo que en realidad es la iglesia católica.
"La Iglesia Católica no es mía ni del padre Raymundo, la iglesia es de Dios… Somos 150 sacerdotes en la diócesis de Tijuana; a todos los he cambiado. En ningún caso han hecho lo que hicieron en Rosarito, como estas manifestaciones y cerrar las puertas de la iglesia con candado. Eso no es la manera de hacer las cosas. Esa no es la doctrina católica", reprendió el Arzobispo ante la multitud de feligreses que lloraban de gozo y mostraban sus pancartas dando gracias por escuchar sus oraciones.