Palco de Prensa: Los “encajes”

Por Gilberto Lavenant
Ayer sábado, el grupo político priísta “Jesús Reyes Heróles”, que encabeza Francisco de la Madrid Romandía, le hizo un reconocimiento a uno de sus integrantes, el Ing. Carlos Thomas Torres Landa.
No se trataba de su cumpleaños, tampoco el que haya recibido algún premio o nombramiento especial. De ninguna manera. Lo reconocieron porque quedó desempleado, pero más bien para resaltar su calidad humana y profesional. Por aquello de que alguien tratase de poner en tela de duda su salida del XX Ayuntamiento de Tijuana.

El exfuncionario municipal lo dice, en tono de broma, que es el puesto público en el que menos tiempo ha permanecido. Apenas cuatro meses. Siendo jóven, laboró durante 3 años en la CESPT, cuando la dirigía el Ing. Juan Ojeda Robles, duró 6 años como Delegado de Infonavit y 10 años en Caminos y Puentes Federales de Ingreso.

En el XX Ayuntamiento solo 4 meses, es para llamar la atención. Quienes lo conocen, le reconocen su calidad profesional, su eficiencia en la función pública, su enorme experiencia en el área en la que se encontraba, Director de Obras y Servicios Públicos Municipales, en donde la tarea más importante, que a la vez representaba un gran reto, lo era el programa de bacheo.

Se mostraba entusiasmado, tenía un gran interés por cumplirle a los tijuanenses, pero a la vez reflejaba preocupación, pues había dicho que la cantidad de baches comprendía una superficie de 100 mil metros cuadrados. Y el Ayuntamiento, carente de recursos para ello.

Por ello, causó sorpresa cuando se supo de su salida del gobierno municipal. Y que conste, no lo despidieron, él renunció. Al tomar la decisión, cuenta, le expuso sus puntos de vista al propio Alcalde. Bustamante simplemente le aceptó la renuncia.

¿Por qué renunció? Bueno, Thomas Torres Landa, es muy discreto. Cuando se le pregunta la razón o motivo de su retiro, simplemente observa y expresa que no “encajó” en la actual administración municipal.

Dicho en otras palabras, no fue por falta de experiencia, ni por falta de ganas para trabajar, ni por ineficiente, sino que simplemente no “encajó”. Dadas tales características y considerando a Carlos como si fuese una pieza de un rompecabezas, esto significa que seguramente quienes están mal, son los responsables del área de desarrollo urbano, en especial de David Navarro, éste joven profesionista que ya estuvo en dicho cargo en la administración de Jorge Hank, pero que definitivamente se negó a aceptar que alguien mucho mejor que lo que él pueda ser, le indicara cómo hacer las cosas.

También dicen, aunque Thomas Torres Landa, se niega a hablar al respecto, que el Secretario de Desarrollo Urbano del XX Ayuntamiento, tratando de quedar bien con el Alcalde Carlos Bustamante, inició obras sin tener el proyecto ejecutivo correspondiente, como si fuese un novato, aprendiz, haciendo a un lado las formalidades y la técnica urbanística. Esto explica las fallas en obras de bacheo en la Zona Norte, que se realizaron, pese a las advertencias de Thomas Torres Landa.

La salida de Carlos, apenas a 4 meses de iniciada la administración del XX Ayuntamiento de Tijuana, es una lamentable pérdida para el gobierno municipal y sobre todo para la ciudadanía tijuanense, que de paso pone en evidencia la falta de carácter ejecutivo y seriedad por parte del Alcalde Carlos Bustamante, cuando deja ir a uno de sus mejores elementos.

Tratando de evitar que se pusiera en tela de duda, la calidad del ahora exfuncionario municipal, y luego no anden diciendo que no renunció, sino que lo corrieron, sus compañeros del grupo “Reyes Heroles”, decidieron darle un espaldarazo. De sus virtudes y calidad profesional y personal, hablaron el Ing. Julio Torres Coto, el C.P. Ramón Marcial, del Grupo 21, Manuel Suárez Soto y el Profr. Enrique Hernández Cobian.

En términos generales, señalaron que sentían pesar por la salida de Thomas Torres Landa de la administración municipal, pero que después de todo “…ellos se lo pierden”, pues era un funcionario vertical, probo y probado. Carlos agradeció las manifestaciones de afecto y como explicación sobre su salida, simplemente dijo : “…no encajé”.

Sin embargo, este hecho deja muchas preguntas en el aire, que ojalá que algún día encuentren respuestas :

¿Siendo una persona experimentada y honesta, qué fue lo que observó en el XX Ayuntamiento, en las que no “encajó”?

¿Será acaso que detectó malos manejos, en el área de obras y servicios públicos?

¿Será que detectó ineptitud y necedad, por parte de su jefe inmediato, el Secretario de Desarrollo Urbano, David Navarro?

¿Será que sus observaciones y recomendaciones, iban a parar al bote de la basura?

¿Será que está faltando seriedad y honestidad, en el XX Ayuntamiento?

¿Será que abunda la grilla y las descalificaciones, al interior del XX Ayuntamiento?

Ahora que, toda vez que Carlos advierte que no “encajó”, quizás se cansó de decirles a los colaboradores de Bustamante Anchondo, aquello de que “…es bueno el encaje, pero no tan ancho”. Porque no es lo mismo, no “encajar”, que “encajarse”. Puede ser…



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