COLUMNA: Palco de Prensa

* Del dicho, al hecho…
Por Gilberto Lavenánt
Este viernes, 15 de octubre, hubo una intensa actividad en la XX Legislatura Estatal. Se instalaron una serie de comisiones e incluso tuvieron sesión los apenas ¨inaugurados¨ diputados locales.

Los directivos de cada una de ellas, trataron de resaltar la importancia de sus respectivas labores a desarrollar. Y de verdad, que todas son importantes. Quizás algunas un poco más que otras, por el impacto inmediato de sus intervenciones y decisiones, como lo serían la de presupuesto y seguridad pública.

Sin embargo, cada una de ellas, inician con el compromiso de trabajar, por mejorar la vida de los bajacalifornianos, pugnando siempre por la justicia social, por perfeccionar y modernizar la estructura jurídica de la entidad, por erradicar males tan añejos como el de la impunidad, la corrupción, el dispendio de los recursos públicos, el uso del dinero del gobierno para fines partidistas e incluso de promoción o beneficio personal de gobernantes en turno.

La tendencia de tener instituciones manipulables y afines a intereses partidistas de quienes gobiernan, la creación o modificación de leyes, por consigna o capricho, por imposición del gobernador o del partido en el gobierno.

La etapa final de comisiones, como la de Reforma de Estado, de la XIX Legislatura, bajo el mando de la dupla Terán-Molina, fue sumamente desaseada, grotesca, mal intencionada, destacando la pretensión de aniquilamiento del Tribunal de lo Contencioso Administrativo, organismo que de por si, está ¨chimuelo¨ y todavía se trataba de sacarle hasta la ¨muela del juicio¨, dizque para ¨preservar la integridad del Ejecutivo Estatal¨.

Por cierto, a propósito de dicha Comisión, quien la preside, el diputado Victor Hugo Navarro Gutiérrez, en el acto de instalación, planteó varios cuestionamientos :

¿Qué estado queremos? ¿Que situaciones no queremos? y ¿Que tenemos que conservar y qué tenemos que cambiar?, además de que advirtió que ¨…no se trata de cambiar para que todo siga igual. Se trata de cambiar para que gane la gente”.
Y eso es lo que se supone, que todos habrán de cumplir con su tarea legislativa, precisamente para que los bajacalifornianos ganen y no para restarles derechos o para imponerles cargas, como ha sido la intención en muchos casos, en los que sin tomar en cuenta la forma de sentir o pensar de los bajacalifornianos, sin considerar las condiciones reales que afrontan, toda vía les asestan puñaladas traperas.
Es absurdo, que los ciudadanos comúnes y corrientes, estén preocupados cuando los flamantes legisladores sesionan en lo oscurito. Hasta se les tiene miedo, porque se ocultan para tomar decisiones absurdas y aberrantes, para tomar acuerdos que implican recesión en el desarrollo político y social en general.
Otra cosa muy importante, o distintiva de esta Legislatura, es que la mayoría prevaleciente, ya no será del partido blanquiazul, del que emana el Gobernador actual, sino que será la del partido tricolor. Y esto no es para aplaudirlo, de ninguna manera, sino que, como en todas las cosas, ojalá que esto sirva para que se establezca un equilibrio, y que nadie se sirva, con la ¨cuchara grande¨. Nada de legislar ¨al vapor¨, nada de ¨sacar ases debajo de la manga¨, nada de aprobar cuentas públicas, con los ojos cerrados y a ¨ojo de buen cubero¨, como al parecer lo hacia el priísta arrepentido Antonio Cano.
Pero que tampoco, el mayoriteo partidista, sea la regla o el método legislativo básico, porque sería tanto como volver a lo mismo, a recurrir a la consigna, al capricho, a la simple intención de fastidiar al que propone, por meras diferencias partidistas, mandando a la ¨congeladora¨ propuestas que pudiesen ser valiosas, pero que no son impulsadas por alguien de esa mayoría controladora.
En la sesión de este viernes, ante el pleno del Congreso, la Diputada Lizbeth Mata Lozano hizo hincapié en que ¨…la sociedad bajacaliforniana, nos ha dirigido un mensaje directo en el sentido de trabajar en armonía, respeto, seriedad y responsabilidad, privilegiando el diálogo maduro y democrático, el intercambio de ideas y la institucionalidad en la creación de las normas jurídicas”.
Que no quede todo en simples palabras bonitas, expresiones impactantes, meras posturas exhibicionistas.
Ojalá que efectivamente se dediquen a trabajar, que para eso los eligieron y para eso les pagan. Aunque sabido es que…del dicho, al hecho, hay mucho trecho.

gil_lavenant@hotmail.com