Por Julieta Martínez
TIJUANA.- Aún no se cumplen dos meses del asesinato de Anastasio Hernández Rojas a manos de agentes migratorios estadounidenses, cuando otro hombre fue agredido por elementos fronterizos que custodian la puerta de entrada a México.
Los guardias norteamericanos encañonaron con sus armas a quienes tomaban video con sus teléfonos celulares, con la aparente intención de intimidar, por lo que muchas personas se retiraron.
A pesar de la hostilidad de los estadounidenses, decenas de personas se arremolinaron en el lugar para exigir que pararan la agresión, por lo que finalmente el hombre que no ha sido identificado fue llevado hacia territorio estadounidense,
A cambio de no revelar su nombre, un testigo explicó que agentes del Instituto Nacional de Migración también grabaron la escena, pero aunque se les buscó a través de personal de comunicación, no hubo respuesta.
Al parecer el hombre agredido, de unos 30 años, estaba a punto de cruzar a Tijuana por la Puerta México cuando se un guardia fronterizo le exigió sus documentos.
Posiblemente se negó a mostrarlos y fue cuando entre por lo menos cuatro guardias lo sometieron y lo tiraron al piso donde lo golpearon con un tolete.
Ante los gritos indignados de los testigos, el hombre fue llevado de regreso a Estados Unidos, sin que se conozca su identidad.
El Consulado de México en San Diego, California no ha respondido a las llamadas telefónicas, así que se desconoce incluso si es connacional.
Apenas el 28 de mayo, una veintena de agentes de la Patrulla Fronteriza y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza del vecino país provocaron muerte cerebral al mexicano Anastasio Hernández Rojas.
Dos días después el hombre murió en el hospital, y hasta el momento no se ha dado información en torno a las investigaciones.
Una semana después, en Ciudad Juárez un agente de la Patrulla Fronteriza asesinó de un disparo al adolescente Sergio Adrián Hernández Huereca.
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