miércoles, 12 de mayo de 2010

COLUMNA: Palco de Prensa

* El “semáforo”
Por Gilberto Lavenant
El Alcalde del IV Ayuntamiento de Playas de Rosarito, Hugo Torres Chabert, tiene una “papa caliente” en sus manos, que le está quemando. Lástima, casi para concluir su administración y las acciones que ha tomado, un tanto tibias, más bien han evidenciado que hubo negligencia de su parte para atender este asunto.

Y que conste, el asunto es gravísimo. Mucho más de lo que se pueda alguien imaginar.

En Playas de Rosarito, el problema de la tenencia de la tierra, urbana, es sumamente serio, como en el resto de los municipios de la entidad. Aunque aquí está desbordado.

El Ayuntamiento de don Hugo no halla ni cómo tapar o bloquear este asunto. Se observa en el portal de internet del Ayuntamiento, en el que a manera de semáforo, en forma permanente pone a disposción de la ciudadanía, para su conocimiento y consulta, los nombres de los fraccionamientos regulares o legales, aquellas que están en proceso de regularización y los que definitivamente son ilegales y respecto de los que sus promotores deben ir a la cárcel.

En el área relativa a la Dirección de Control Urbano, Departamento de Acciones de Urbanización, describe los tres tipos de desarrollo urbano que identifica bajo los colores del semáforo, vedes, amarillos y rojos.

Los verdes, que suman 72, son con los que no hay problema. Los refiere como fraccionamientos autorizados para efectuar actos traslativos de dominio e indica que las ventas que realicen pueden ser objeto de titulación, pues no existe inconveniente para que el fraccionador pueda llevar a cabo la escrituración o titulación del inmueble adquirido en esos sitios.

Los amarillos, que son 63, advierte que son fraccionamientos que se encuentran en proceso de autorización y precisa que estos no tienen facultades de llevar a cabo actos traslativos de dominio, pues no pueden ser susceptibles de titulación.

En estos casos, también se advierte que en caso de darse una venta o preventa, o bien promesa de venta, se estaría infringiendo el Artículo 134 del Reglamento de Fraccionamientos del Estado de Baja California y las ventas que se realicen quedarían afectadas a las consecuencias de las disposiciones del reglamento en mención. Simple y sencillamente, no pueden vender.

Y finalmente los rojos, que suman 20, son los fraccionamientos que no están reconocidos por la autoridad municipal, pues son ilegales o irregulares, respecto de los que quienes vendan o prometan vender, predios de esos desarrollos urbanos, estarían sujetos a que se les impongan las penalidades que establecen los artículos 218 fracción II, 220 y 223 del Código Penal del Estado de Baja California, con penas que van de 4 a 9 años de prisión.

La lista está ahí en el portal de internet del Ayuntamiento de Playas de Rosarito, para conocimieto y consulta de cualquier persona que haya adquirido o pretenda adquirir un predio en el llamado Quinto Municipio de Baja California, guiándose con los colores del “semáforo” y puedan proceder en consecuencia.

El trabajo al respecto, por parte de la administración de don Hugo Torres, puede parecer encomiable, pero no bastante o suficiente para frenar este problema que definitivamente se le salió de control, o mejor dicho, que nunca supo controlar. Quizás ni atención le puso.

Lo más contundente que había hecho al respecto, fue durante la primer semana del presente mes de mayo, cuando el Departamento de Fraccionamientos procedió a clausurar las oficinas de ventas de varios de esos desarrollos irregulares.

Salieron a relucir nombres como el de Mari Chuy Maldonado, en Boulevard Popotla, esquina con Boulevard 2000; Inmobiliaria Terra Vista best buy in Baja, en el kilómetro 29, sobre el Boulevard Popotla; Laura Gutiérrez, Inmobiliaria Rosarito, en la Colonia Independencia y el de Salvador Lara Rangel, en el kilómetro 19.5 de la carretera libre, en el Plan Libertador.

También surgieron otros nombres, como el de Alicia Rodríguez Quiñonez, en el kilómetro 20 de la carretera libre, en la Colonia Benito Juárez, Ricardo Zazueta Villegas, Antonio González Piñuelas y Antonio Zazueta Villegas, en el kilómetro 19.5 de la carretera libre, en la Colonia Independencia.

También se clausuraron oficinas de Laura Gutiérrez, en la carretera libre, Local 23-A, en la Colonia Independencia y Reality Executives y/o Diane Gibbs Constructora Fortaleza, en el kilómetro 44.5 de la carretera libre.

El negocio ha sido jugoso para muchos vivales y esto es tan solo el principio. Se sabe que estos asuntos ya se empiezan a manejar en los terrenos judiciales y varios de esos personajes podrín ir a prisión. Entre ellos el flamante excandidato priísta a diputado federal, Ricardo Zazueta Villegas, socio de otro individuo de nombre Carlos Lagos Yagues, que operan bajo el membrete de una empresa que identifican fácilmente como Lagza –se compone con los apellidos de ambos- involucrada en serios problemas urbanísticos.

No es mucho lo que ha hecho don Hugo Torres, al respecto, pero es un buen inicio. En breve comentaremos mucho más sobre estos asuntos y en especial sobre el famoso Rancho El Rosario y la historia de Joaquin Machado, que podría ser identificado como el fraude del siglo en Baja California. Ya verán.


gil_Lavenant@hotmail.com

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