COLUMNA: Expediente Político‏

* Rescatando al Junior
* De los miedos de Hugo Torres, el transporte público
* Norma y Hugo, y su extravagancia, el gran parque
Por Alfredo Calva

Rescatando al Junior

Como padres tenemos la obligación de apoyar a nuestros vástagos en la medida que nos permitan nuestros recursos y posibilidades, acción que es loable, pero esta, se transforma en ilegal cuando, empleamos recursos económicos que pertenecen a otros, y esto, debería de haber sido engullido desde que arribo al gobierno local como presidente municipal, Hugo Torres Chabert, pero una cosa es lo que debió de ser, y otra lo que es.
El alcalde tuvo a bien emplear recursos públicos para pagar dos programas radiofónicos, que fueron transmitidos en vivo desde la sala de usos múltiples de palacio municipal, el primero, el pasado miércoles a partir de las 13:30 horas, a cargo del comunicador Fernando del Monte, el segundo, el viernes ultimo y este fue responsabilidad del periodista Martín Bourchart. En ambos eventos, el tema toral consistió en dar a conocer las acciones que llevara a efecto las fuerzas vivas de esta comunidad para sacar adelante a Rosarito, y en especial a la venta de inmuebles en este paradisíaco lugar, en otras palabras, impulsar la imagen del jovencito Gustavo Torres Ramírez, hecho que es loable por parte del papá Torres Chabert, pero reprobable e inmoral, por parte del alcalde Hugo Torres Chabert, así que, esperemos y confiemos que, el Sindico Procurador Arístides Valdespino, tome nota y por que no, revancha del primer edil, por haberlo tipificado como “chivo en cristalería”.
Ya veremos dijo un ciego.

De los miedos de Hugo Torres, el transporte público

Son tantas las ocasiones en que el alcalde a esquivado su responsabilidad y promesa de campaña de dar solución a la problemática del transporte publico que ya hasta perdí la cuenta, y en la sesión de cabildo celebrada el pasado martes, no podía ser la excepción.
Para esta sesión se contemplaba someter a votación la propuesta y dictamen que el regidor Juan Manuel Leyva, presidente de la Comisión de Transporte, trabajo y consenso entre los ediles integrantes de la citada comisión, que por cierto fue un milagro que los pudiera reunir, sin embargo, el alcalde Hugo Torres , solicito sacar de la minuta de trabajo de la sesión el tema para dijo, tratarlo en reunión especial con todos los ediles para consensuar y dar una solución al problema, en otras palabras, evadió el problema, o bien, tuvo miedo de que los representantes y dueños de las conseciones se le fueran a la garganta y lincharan al cabildo en pleno.
Es importante señalar a mis tres adictos y adeptos lectores que, minutos antes de que diera inicio la sesión de cabildo, los trabajadores del volante, se apersonaron en las afueras de palacio municipal, portando cartulinas con leyendas bastante agresivas como “Hugo, Macias recibió 50 mil dólares, tu cuanto”, y por ese tenor las demás, por lo que se deduce que Torres Chabert y correligionarios optaron por “mas vale que digan que aquí corrieron, que aquí quedaron”
Lo anterior solo tiene una lectura, Hugo Torres Chabert, tiene miedo de entrarle al problema y por ende dará largas a este y buscara heredarlo a la siguiente administración, total, una promesas mas sin cumplir, es como si se le pinta una raya al tigre, no pasa nada.
Y si no, al tiempo.

Norma y Hugo, y su extravagancia, el gran parque

El pasado miércoles, la Regidora del escaso nombre, Norma Olivia Mercedes Gutiérrez Espinoza y el alcalde Hugo Torres Chabert, dieron rienda suelta a su desvarió, que ellos venden a la población como “El Gran Parque”, y para ello, se dieron a la tarea de trasladarse a Lago Santee, en el vecino estado de California, para conocer la forma en que reutilizan el agua para poder abastecer los siete lagos artificiales con que cuentan en esa zona, y constatar las razones y acciones que han hecho que ese sitio se transformara en un atractivo turístico autofinanciable y ecológico.
Su empecinamiento por llevar a efecto su extravagancia, orilla a estas dos lumbreras a buscar con afán inaudito (todo por el negocio inmobiliario), obras fatuas que se puedan implementar y construir en el gran solar que dono el ejido Mazatlán, en un acto de magnificencia social, para incrementar la plusvalía de los terrenos aledaños al predio en cuestión, y con ello, poder mercadear a valor sustancial el metro cuadrado de los mismos, total, todo a cargo del erario publico.
Por lo pronto, y espero que no suceda, ambos personajes están ciertos que, los consejeros municipales de Copladem autoricen (eso si seria una verdadera estulticia) recursos para el gran parque y con ello se pueda construir la plaza cívica a la que ya bautizaron como “Plaza del Bicentenario”, ya que esta acción alejaría la posibilidad de rescatar parques que hasta el momento la administración de Torres Chabert, no ha volteado a ver.
No hay milagros, pero esperemos.