PLAYAS DE ROSARITO.- Sin elementos para basar su denuncia, un elemento de seguridad asignado a la tienda de abarrotes y distribuidora “El Florido”, acusa de robo a clientes del negocio, sin fundamentar sus bases ante las autoridades y tratando de sacar ventaja económica.
La tarde de ayer, dos mujeres residentes de Tijuana, que aseguran ser clientes de esta negociación desde hace muchos años, fueron acusadas por Salvador Tejeda Rodríguez, supervisor de la seguridad interna, de sustraer mercancía sin pagarla, por lo que exigía el pago de mil 200 pesos o de lo contrario, las presentaría ante las autoridades.
Sin temor porque no habían cometido ningún ilícito, las clientas de nombre Ángela Inzunza de 23 años de edad y Mónica González de 35, no resistieron a su presentación ante las autoridades, donde no se les comprobó el supuesto delito.
A la comandancia jamás acudió Salvador Tejeda a presentar la denuncia, solo se quedó vociferando en la tienda contra de sus mismos compañeros guardias, por no realizar -según el-, bien su trabajo.
También amenazaba con despedirlos de la empresa para la que trabajan, por sus supuestas omisiones.
Un caso similar ocurrió por la mañana de este jueves, con otro cliente, a quien tampoco se le pudo comprobar su infundada acusación.
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