Por Sergio Anzures.
En las últimas semanas se ha escrito y comentado que existe una separación entre el gobernador dr Baja California, Jaime Bonilla Valdez y el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, pero ninguno lo ha afirmado o negado.
La semana pasada la directora del semanario Zeta, Adela Navarro, en una columna publicada en el Washington Post y titulada “El gobernador que se convirtió en enemigo íntimo de AMLO”, da cuenta que la pasión por el béisbol y la amistad que unía a Bonilla y al presidente, ahora los separa la responsabilidad del gobierno.
En la columna, la periodista Adela Navarro, asegura que el punto de partida del rompimiento, fue el capricho de Bonilla de quedarse tres años más, adicional a los dos para los cuales fue electo como gobernador.
Además que desde el primero de noviembre de 2019 cuando rindió protesta Bonilla como gobernador, el presidente López Obrador no la ha recibido de manera pública, y da más detalles.
Al mediodía de este martes, el gobernador Jaime Bonilla hizo una declaración que abona a la posibilidad de ese rompimiento de amistad con el presidente López Obrador.
Esto dijo: “Yo le he hecho una promesa al presidente de que Baja California, será el Estado que crecerá más en su Producto Interno Bruto (PIB) y eso significa implementar la verdadera "Zona Libre, que no es la que tenemos ahorita.
Ahorita tenemos unas canonjías, algunos beneficios, sí del IVA, claro que ayudó, también el ISR, todo suma.
Pero lo que verdaderamente va a ayudar es cuando movamos la aduana 30 kilómetros como prometió el presidente que lo iba a hacer, y yo les digo; yo le he mantenido cariñosamente los pies en el fuego al presidente, para que no se le olvide. Esa es la Zona Libre, la que nos permita a nosotros eliminar aranceles, la que nos permite ser competitivos con ellos al otro lado”.
Analistas consultados por AJEDREZ POLÍTICO, indicaron que la frase mantener los pies en el fuego, significa una tortura para que hable o cumpla algo, por lo que se sorprendieron de esa declaración del gobernador Jaime Bonilla.
Esperemos, señalaron, que no sea cierto ese alejamiento del que se habla, porque afecta a Baja California, y por lo pronto se asegura recortaron mil millones de pesos a las participaciones federales para el Estado.
“Se habló tanto de una estrecha relación de amistad entre Bonilla y López Obrador durante la campaña electoral, de que a Baja California le iba a ir bien, como para que ahora no sea cierto”, concidieron analistas.
A la columna AJEDREZ POLÍTICO también se le aseguró que en la visita a Tijuana de la semana pasada del secretario de la Defensa Nacional, Luis Crescencio Sandoval —del cual nunca se mencionó en los comunicados de prensa— y del secretario de Seguridad, Alfonso Durazo, para la inauguración de las instalaciones de la Guardia Nacional, le pidieron al gobernador Jaime Bonilla, corriera al director de los Ceresos en Baja California, Marcos Esteban Juárez Escalera.
Este general apodado “El Caminante” fue citado en un reportaje del semanario Zeta como el mismo personaje involucrado en las investigaciones de la desaparición de los 43 estudiantes de la normal de Ayotzinapa, Guerrero.
“El Caminante” lo negó en una carta aclaratoria diciendo que no es él, que lo han confundido.
Por lo pronto está fuera de la administración estatal y se asegura se lo pidieron al gobernador, el general Luis Crescencio Sandoval y el licenciado Alfonso Durazo.
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