Por Gerardo Díaz Valles
Con nosotros, sin nosotros y a aun pesar de nosotros, se advierte en Rosarito el arribo de un cambio de fondo en la forma de hacer las cosas, en la forma de dinamizar la economía, al pasar de una mentalidad de pueblo aletargado por un caciquismo rampante, a un municipio competitivo, moderno.
Esos vientos de cambio se perciben por un lado en los procesos de renovación de quienes dirigen los destinos del Comité de Turismo y Convenciones (COTUCO-Rosarito) en donde hay dos competidores con personalidades proyectos diferenciados: Víctor Loza Bazán, agente inmobiliario y fundador de la Asociación Civil “Yo Amo a Rosarito” y Manuel Padres Verdia. Este ultimo además de ser el presidente de la Asociación de Hoteleros y representante no sabemos si aun, del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), además de que su domicilio familiar lo tiene en la ciudad de Mexicali y su registro de última hora indica que hay un interés desesperado de algunos sectores anquilosados de mantener esa figura conservadora del caciquismo, ese viejo y obsoleto esquema que mantiene en el retraso a nuestro municipio en donde uno habla y los demás callan sumisamente la cerviz. El otro ejemplo de ese viento de cambio lo advertimos en la renovación de la dirigencia en el Sindicato de Burócratas, en donde se registraron tres formulas con proyectos muy distintos de lo que se espera de una organización moderna con la estatura y calidad moral suficiente para negociar con los gobiernos en turno los beneficios para sus agremiados. Domingo Gilbert, Guillermo Castro y Silverio Ricon, buscan hoy convencer a sus compañeros de que son garantía de tener el mejor proyecto de trabajo y donde los mismos burócratas saben distinguir en si se vuelve al viejo y agotado esquema en donde dos dinastías familiares se turnaban la dirigencia con los resultados bien conocidos( Juniors que le dieron al traste a las luchas reivindicatorias y fortaleza de la organización), o le apuestan a una dirigencia de nivel, capacidad negociadora y mentalidad moderna. Los burócratas bien saben, que están en la posibilidad de empezar a cosechar lo sembrado o si retornan al mismo viejo esquema de clanes familiares forrados de vicios…. Y para finalizar les comparto que mi Amigo Pablo Soto, actual presidente del Club Rotario de Playas de Rosarito, tiene un sentimiento trágico de la vida, pues no le podemos quitar su lema de que: "El éxito significa ir de fracaso en fracaso sin perder el entusiasmo", seguiremos persuadiéndolo de un cambio…
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