Por Gilberto Lavenant
Dice un dicho por ahí que “árbol que nace torcido, nunca se endereza”. Ese parece ser el destino de la Escuela Preparatoria Federal “Lázaro Cárdenas” de Tijuana, cuyos directivos, a lo largo de su historia, salvo prueba en contrario, la han convertido en un negociazo mercantil. Algo así como una franquicia, cuya explotación está a cargo de un grupito de personas, confabulados con los directivos en turno.
Luego de 17 años de estar regenteando, dicha institución, bajo el cargo de director, José cruz Holguín, utilizando una sociedad de padres de familia, encabezada por personas que ni siquiera tenían hijos en el plantel, los profesores se plantaron en las puertas de la dirección, protestando porque mediante desaseado proceso se designó como relevo al subdirector Martin Moreno Félix.
Los docentes habían manifestado sus temores fundados de que el nuevo director continuaría el negocio mercantil y por ello lo rechazaban. El conflicto concluyó cuando en un trato oscuro, en el que varios de los inconformes fueron consolados asignándoles subdirecciones y supuestamente bajo la condición de que los beneficios mercantiles se clarificaran y se reflejaran en mejoras de la institución.
El “impuesto” Martín Moreno, se mantuvo en el cargo, del cual no había podido tomar posesión, cuando numerosos maestros inconformes decidieron declararse en asamblea permanente, bloqueando la puerta de acceso a la Dirección de la institución, con mantas en las que se observaban leyendas tales como : ¡Basta de toma de decisiones unilaterales! ¡No a la imposición del profesor Martín Moreno Félix! ¡Exigimos retiro inmediato del profesor José Cruz Holguín” y otras más.
Sin embargo, la cosas no quedaron claras, pues no se reveló, por ejemplo, si seguiría funcionando la “Sociedad de Padres de Familia, S.A.” que durante el conflicto trascendió que maneja anualmente 25 millones de pesos, producto de todas las actividades mercantiles dentro de la institución.
Irónicamente, a raíz del accidentado procedimiento de renovación de Director de la Preparatoria Federal Lázaro Cárdenas, salió a relucir que una era la destacada proyección de la institución, como una de las mejores en calidad educativa, y otra, sumamente nebulosa, la lucrativa empresa establecida bajo la sombra de la misma.
El negocio resultaba fabuloso, sumamente atractivo. La institución educativa, con una población de 5 mil estudiantes, en la que al inicio de cada ciclo escolar, unos 3 mil jóvenes presentan solicitud de ingreso. Ahí empieza el negocio. A todos y cada uno de los jóvenes que deseen inscribirse o reinsicribirse, se les obliga a vender 10 boletos, con un costo de 100 pesos cada uno, además de que anualmente organizan rifas de automóviles y artículos diversos, y se establece como condición para la inscripción, acreditar el pago de los boletos.
Pero eso solamente es una parte, pues al interior del plantel se ha instalado un verdadero “shoping center”, en donde funcionan un Café “D´Volada”, una cafetería más y un expendio de “comida chatarra”, una papelería, una librería y un expendio de uniformes. Para los estudiantes, es obligatorio comprar todo ahí.
Al frente de la sociedad de padres de familia, y por lo tanto a cargo de la explotación mercantil de la institución, permaneció durante 12 años una señora de nombre Norma Aguirre de Noriega, que ni siquiera hijos tenía en el plantel. Se le validaba, reconociéndola como “tutora” de alguno de los estudiantes.
Presionado por los padres de familia inconformes por estos manejos mercantilistas, el nuevo director, Martín Moreno Félix, tuvo que echar a andar el proceso de selección de los integrantes de la Mesa Directiva de la Asociación de Padres de Familia, para el período de octubre del 2012 a septiembre del 2014. La convocatoria fue publicada el 4 de octubre y las elecciones deberían efectuarse 11 días después.
Un mes después, ha trascendido que el director del plantel ha estado maniobrando para que la nueva mesa directiva de la sociedad de padres de familia, sea afin a sus intereses, para que las cosas sigan igual, como se manejaron durante la administración de su antecesor, Cruz Holguín.
Se pretende que el lunes 26 de noviembre, a partir de las 18:00 horas, se lleve a cabo la elección de los nuevos dirigentes de dicha sociedad de padres de familia. En el proceso participan 3 planillas, o sea 2 afines o patrocinadas por el director Martin Moreno Félix, identificadas bajo las denominaciones de “únete, qué jaguares tan padres”, la color “azul dorado” y la conformada por padres inconformes, identificada como “blanca”.
Varios padres de familia manifestaron al columnista que son más que evidentes las intenciones de las dos planillas afines al director, y las de éste mismo, de seguir operando el plantel educativo como un negocio mercantil.
Dicen que ya están hartos de que individuos sin escrúpulos sigan especulando con la institución educativa, lucrando como si fuese una empresa privada. Que están dispuestos a luchar, para que se acaben todas esas anomalías.
Hicieron un llamado a todos los padres de familia de los 5 mil estudiantes de la prepa Lázaro Cárdenas, para que, asumiendo la responsabilidad como tales, luchen para que la institución deje de ser una franquicia mercantil y que los beneficios económicos que se obtengan, se manejen con claridad y en beneficio de la institución.
Están preocupados por las evidentes intenciones mercantilistas de quienes pretenden imponer una sociedad de padres de familia que continue manejando la institución como una empresa privada, dejando de lado los aspectos académicos.
La cita es el lunes 26 de noviembre, a partir de las 18:00 horas. Basta de torceduras. Bueno, de chuecuras, para ser más claros.
gil_lavenants@hotmail.com
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