Proyecta obra Rosarito, sin tener permiso

Por Carmen Gutiérrez (Frontera)
Varios son los proyectos que se han planteado desde que Rosarito se convirtiera en municipio para dotar de infraestructura a la playa, su principal atractivo turístico, pero a lo largo de los años ninguno ha prosperado. En este trienio surge uno nuevo que incluso antes de iniciar ya enfrenta dificultades para su construcción.


Tras desecharse el proyecto ejecutivo denominado “Playa Norte” cuyo costo ascendió a 1.5 millones de pesos, según las autoridades de turismo y para el cual habrían de invertirse 10 millones de pesos en su primera fase el año pasado, un nuevo proyecto surgió para el cual también se invirtió una cifra igual para su creación con recursos provenientes del Fondo de Infraestructura Municipal (Finframun), pero para construirse del lado Sur en la misma zona de playa ubicada en el centro de la ciudad.

El recurso para la obra que asciende a 40 millones de pesos, se irá a fondo muerto y ya fue autorizado, sin embargo las autoridades municipales enfrentan el primer tropiezo, toda vez que para su ejecución deberán obtener el permiso de trece concesionarios de playa que serán afectados por las obras.

La experiencia de obras planeadas en la playa y que después se suspenden por no contar con el permiso de los afectados no es nueva para Rosarito, pues durante el gobierno de Antonio Macías se invirtió cerca de 4 millones de pesos para la construcción de un Poliforum, pero que fue cancelado meses después de iniciadas las obras por las demandas interpuestas de los afectados, sin embargo José Carlos Gay, secretario de Administración Urbana del Ayuntamiento, confía en que la historia no se repita.

Y mientras las autoridades no se ponen de acuerdo para llevar infraestructura a las playas de Rosarito, éstas sólo ofrecen a los visitantes mar, arena y un pequeño modulo de sanitarios que dan servicio al turismo que en días de calor reúne a más de 10 mil paseantes.

Los conflictos…

La idea de llevar a cabo un proyecto tan ambicioso a la práctica como lo es la construcción de la Playa Norte, presupuestado en 120 millones de pesos, y que además fue planeado para crear infraestructura en la zona opuesta a la hotelera bajo el argumento de ofrecer más espacio a los visitantes, no fue secundada por las actuales autoridades debido a que se consideró que era más urgente crear obra en la zona de playa que recibe el mayor número de turistas y que es precisamente el lado contrario al planeado, explicó José Carlos Gay.

Detalló que el año pasado se asignaron 10 millones de pesos para la primera fase de la Playa Norte, pero los recursos provenientes de la Federación y el Estado no se ejercieron por motivos, que dijo desconocer.

El problema que ahora se enfrenta para rescatar el recurso, planteó, es que se etiquetaron en el presupuesto del 2011, pero aun así se solicitó una prórroga para que el dinero no se pierda y pueda ser aplicado en una parte de este proyecto que contempla construir un estacionamiento por el lado del camino viejo a Pemex, un mirador a la altura de la calle Calzada de la Playa y unos arcos que den la bienvenida a los visitantes por esta misma zona, además de un pequeño andador, explicó el funcionario, pero advirtió que hasta la fecha no se sabe si el recurso se podrá recuperar.

Comentó que desde el periodo de Luis Enrique Díaz Félix hace ya 10 años, se propuso la construcción de un andador turístico en la misma zona donde actualmente se planea, pero en aquel entonces los comerciantes se opusieron al proyecto por considerar que afectaría la operatividad de sus negocios.

Y fue hasta el gobierno de Hugo Torres cuando se impulso y se promovió recursos para infraestructura en la playa, pero sólo se heredó un proyecto ejecutivo, que reiteró, es muy costoso y ante las condiciones económicas por las que atraviesan los gobiernos es más difícil que asignen recursos para su construcción.

En tal sentido, mencionó que el alcalde Javier Robles optó por crear un nuevo proyecto que fuera más viable y menos costoso para cambiar la imagen de la playa centro y hacerla atractiva, pero además reactivar la economía de la zona turística.

El reto…

Son trece los concesionarios que deberán de ceder 6 metros de terreno cada uno para la construcción del andador turístico o malecón que está dentro del proyecto refiere Gay González, al aceptar que aún no se reúne con ellos para plantear los detalles de las obras.

“El rechazó de los concesionarios podría echar atrás este proyecto, pues sería difícil construir sobre la zona sin el consentimiento de los posesionarios, aunque existen recursos legales” especificó.

¿Realizaron y promovieron un proyecto sin considerar que para su ejecución necesitaban permiso de los afectados?
Ya sabíamos que enfrentaríamos este problema, pero necesitábamos tener el proyecto ejecutivo de las obras para saber la afectación y el costo, y hasta entonces hablar con los concesionarios para convencerlos de las bondades de las obras, que es precisamente el paso siguiente.

En caso de que algunos de ellos no acepte ¿qué pasará?
Yo pienso que nadie se va a oponer, nuestros argumentos son infraestructura turística para detonar el área comercial y es algo que los comerciantes han estado solicitando desde hace muchos años, pero en el último caso quedarían los recursos legales.

El proyecto es muy bondadoso, pero además, no tendrá ningún costo para los concesionarios, explicó el Secretario de Administración Urbana, los comercios que están sobre el área donde se construirá el andador tendrán acceso a él, lo que resultará muy atractivo para su clientela, y aparte les servirá de protección e incluso muchos de ellos piden la concesión en zona federal para protegerse de las olas y está vendrá implícita en las obras.

El proyecto…

La obra tendrá un costo de 40 millones de pesos que ya fueron autorizados para disponerse durante este año y abarcará una dimensión de 1.3 kilómetros que tienen como punto de referencia desde arroyo Huahuatay hasta el muelle del Hotel Rosarito, explica.

En este tramo se tiene programado la construcción de un área recreativa junto al muelle y a la altura de la calle de Las Palmas iniciará la construcción del andador turístico que abarcará 6 metros de ancho y será construido de concreto.

También se construirán estacionamientos y en el área donde actualmente se encuentra el estacionamiento del DIF se edificará la plaza central que contará con un teatro al aire libre con capacidad para 800 personas y para concluir a la altura del arroyo Huahuatay también habrá una plaza con áreas de esparcimiento, detalló Gay González.

Precisó que las obras darán inicio en el mes de junio, tiempo con el que se cuenta para obtener el permiso de los concesionarios y que éstas se realicen sin mayores contratiempos.