El doctor José Morales Bustamante, coordinador delegacional de Medicina Familiar del Instituto Mexicano del Seguro Social en Baja California y zona parcial de Sonora, mencionó que en los periodos vacacionales son muy frecuentes las quemaduras de primero y segundo grado, ocasionadas por exponerse al sol sin la protección del bloqueador adecuado y debido a que los destinos de playa y balnearios son muy visitados.
Los niños, agregó, son más susceptibles a padecer estas molestias, ya que permanecen por lapsos de más de una hora bajo las radiaciones solares y al entrar o salir constantemente de las albercas o el mar, pierden la protección de los bloqueadores. Las quemaduras de segundo grado se manifiestan como un enrojecimiento de piel y ampollas.
Señaló que para proteger la piel es necesario utilizar bloqueadores solares que proporcionen un factor de fotoprotección superior al nivel 30, que es la medida que se utiliza en estos productos y se debe aplicar de forma abundante en el cuerpo cada dos horas. La prevención, continuó, se puede complementar con el uso de prendas de color blanco, gorras o sombreros.
El Dr. Morales Bustamante, explicó que a los pacientes que presentan estas molestias, el Seguro Social les prescribe tratamiento antiinflamatorio oral o de aplicación directa; no obstante, es necesario que el médico valore cada caso para determinar la medicación más conveniente.
Descartó el uso de remedios caseros como mayonesa, limón o vinagre para disminuir los síntomas ya que pueden agravar la irritación o provocar problemas infecciosos.
También advirtió que las radiaciones solares pueden generar daños permanentes en la epidermis que van desde quemaduras y arrugas hasta cáncer de piel como el melanoma, que se caracteriza por la aparición de lunares de tono rojizo, por lo que recomendó acudir con el dermatólogo quien determinará el tratamiento adecuado.
Explicó que la deshidratación es una complicación que se debe prevenir en los menores; se trata de una alteración hídrica y electrolítica que se presenta por la pérdida de agua a través del sudor. Exhortó mantenerlos hidratados con agua y con bebidas que mantengan electrolitos, como la fórmula “vida suero oral” sobre todo a los pequeños de seis meses.
Si los niños están irritables, lloran mucho o tienen más sueño del normal, pueden ser síntomas de deshidratación, por ello los padres de familia deben de acudir a la Unidad Médica del IMSS más cercana para que un especialista valore el estado de salud del menor.
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