Por Sergio Anzures.
Señores magistrados del Tribunal Electoral de Baja California, ya dejen de dar pena y de hacer el ridículo, pónganse a trabajar de forma transparente y libremente.
Magistrados Jaime Vargas Flores y Leobardo Loaiza Cervantes: no se vale que trabajen bajo instrucciones de ciertos políticos (sus padrinos Jaime Bonilla y Fernando Castro Trenti); ¿de qué sirven las maestrías académicas que cursaron?
Otra vez, el Tribunal de Justicia Electoral de la Federación (la Sala Regional de Guadalajara), les dió una lección al revocar la sentencia que arbitrariamente Jaime Vargas y Leobardo Loaiza, con la comparsa del Consejo Estatal Electoral, habían dado en contra del PAN.
Esa sentencia daba 72 horas al PAN para cambiar candidato a la presidencia municipal de Tijuana o Mexicali, porque violentaban la equidad de género.
Ello era una aberración y quedó demostrado con la revocación de la Sala Regional de Guadalajara del Tribunal de Justicia Electoral de la Federación.
Integrantes del Consejo Estatal Electoral y del Tribunal Electoral Estatal si tienen vergüenza, sean imparciales y brinden las condiciones para un juego limpio electoral, es un llamado que le hacen los ciudadanos.
A los magistrados electorales Jaime Vargas y Leobardo Loaiza no les quedó claro que sus sentencias violan las leyes electorales y la Constitución Mexicana, como la que ampliaba de dos a cinco años la gubernatura de Baja California.
Ante ello la Sala Regional de Guadalajara la revocó.
¡Ah! “el Patas” Gastélum parece gato de siete vidas; algunos que no conocen la Constitución Mexicana ya lo daban por muerto en esta elección.
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