Ni con la estrepitosa derrota de su partido le ha caído el veinte a Peña Nieto.
Sus despedidas y último informe de gobierno desconocen por autoengaño o cinismo, que su administración se caracterizó por la inseguridad y la corrupción; que fueron precisamente, las razones que llevaron al triunfo a López Obrador.
Pero tuvo que admitir, que nos mintió y la Casa Blanca fue comprada también por él.
Y a propósito ¿Qué no era el Presidente quien debía acudir al Congreso?
¿Será signo de los nuevos tiempos la oronda presencia de los morenistas jefes de ambas cámaras, en el acto de Palacio?
Ojalá el presidente electo recuerde, que el declive de su antecesor se debió en gran parte a su servilismo ante Trump; lo digo, porque AMLO agradeció al tipo que más nos ha insultado “… que de un tiempo a esta parte, ha sido muy prudente o no ha hecho comentarios ofensivos al referirse a los mexicanos”
Y no hubo por ello, cuestionamiento alguno entre sus partidarios porque “el honor de estar con López Obrador”, los ha silenciado.
Tampoco hubo oposición, a ungir senador a Napoleón Gómez Urrutia; convertido por obra de Obrador, en político probo que ofrece reconciliación; pero amenaza a quienes lo acusan de haberse quedado, con 55 millones de dólares del sindicato minero.
Con la complicidad de Morena otro personaje pero del Partido Verde, Manuel Velasco, es al mismo tiempo senador, gobernador y rey del chapulineo, al renunciar en pocas horas al gobierno de Chiapas para asumir como senador; y luego a la curul, para regresar a la gubernatura que dejará en diciembre, para volver al congreso.
Y miren qué linda coincidencia: ese mismo martes 4, cinco diputados del Verde se pasaron a Morena y le dieron mayoría absoluta en la cámara baja.
Mientras el senador, del PRI, Noé Castellón, no asume porque anda escondido para evitar lo detengan por violencia doméstica.
Esas y otras son algunas de las insensateces de una semana, en la que se supo que:
*La reforma educativa que va a ser revocada, costó 51 mil millones de pesos.
*Están inflados los datos del gobierno del sector salud; pero ni así, se cubre a toda la población.
*No hay claridad en el pago de cinco mil 88 millones de pesos, hecho por el Infonavit a una empresa privada.
*Peces, manatíes y tortugas en extinción, murieron atrapados en redes de pesca. Y por descuido de la ineficaz secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, una isla protegida de Veracruz, fue usada para una fiesta privada.
*Lluvia caída en el sur de la Ciudad de México ocasionó como cada año, inundaciones y caos; no se destinan los recursos requeridos a evitarlo, pero los hay en abundancia para la Asamblea Legislativa; que repartió ilegalmente, 294 millones de pesos.
*Porros enviados expresamente a golpear universitarios, provocaron paros en 39 planteles de la UNAM.
*En lo que va del año Peña lleva gastados, 38 mil 483 millones de pesos más que lo aprobado por la Cámara de Diputados.
*El Coneval, organismo que evalúa las acciones gubernamentales, reiteró que los planes de combate a la pobreza de los últimos 40 años, han sido ineficaces.
*En su informe “La ineficiencia de la Desigualdad”, la CEPAL precisó que los recursos de los 10 mexicanos más ricos equivalían en 2017, al total de ingresos de 60 millones; lacerante inequidad que, según el rector de la UNAM, Enrique Graue, es un monstruo que nos destruirá, si no lo combatimos.
*Esa desigualdad causó la muerte de Luis, un niño pepenador de siete años aplastado por un deslave en un tiradero de Ixtapaluca, cuando de madrugada y junto a su madre y una hermanita, buscaba deshechos de metal.
*Y también los linchamientos de cuatro personas en Hidalgo y Puebla; y la banda de niños que asaltan en el Periférico.
Frente a estas y otras desvergonzadas y vergonzosas noticias, reconforta se reconozca a personas íntegras y decentes, como la bióloga y catedrática de la UNAM, Julia Carabias Lillo.
Dedicada a investigar el desarrollo sustentable, a dar apoyo a las comunidades indígenas, y a defender la Selva Lacandona; y siempre buscando hacer compatibles los derechos humanos con los ambientales, para poder conservar nuestra biodiversidad, Julia ingresó a El Colegio Nacional con un discurso sobre medio ambiente, equidad y democracia.
Partiendo de que todos los seres vivos son valiosos, lamentó que la sociedad mexicana se enfoque más "en el valor económico de todo; incluyendo la naturaleza”.
Y llamó a cambiar estructuras políticas y relaciones obsoletas “arraigadas por visiones clientelares de corto plazo, y reticencias de muchos sectores".
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