Mandos de la Dirección de Policía Municipal abusan de sus cargos y aprovechan para su beneficio que nadie los investiga y menos los corrige, lo que le ha dado al traste a la imagen de la corporación y confianza de los ciudadanos hacia sus uniformados está por los suelos.
Esta ha sido la tónica en el equipo del Teniente de Corbeta Adrián Hernández Pérez quien ha pasado “sin pena ni gloria”. Un ex militar de expediente sucio, y quién asumiera el mando bajo grandes expectativas, impuesto casi con calzador al ser recomendado por otro teniente y no menos polémico Coronel Julián Leyzaola Pérez, todo un caso paradigmático de un duro e improvisado policía con antecedentes de torturador, pero ahora metido a político y eterno candidato de lo que caiga y en donde caiga con tal de vivir del presupuesto....el caso es que en Rosarito el ex militar Adrián Hernández ni ve su sello, ni oye ni nada y más bien se hace "guaje" frente a tantas tropelías, saqueos y abusos que cometen "a todas horas" sus sin alternos empezando por el Subdirector Operativo Cesar Silva Ibáñez quien prácticamente se ha convertido en el verdadero "poder detrás del trono", el “comanche de comanches” pues se armó de un compacto equipo de cómplices e incondicionales para “hacer y deshacer” a placer y antojo. La tranquilidad, la seguridad y sobre todo la confianza de los ciudadanos hacia sus policías municipales, esa eterna demanda y promesa tan manoseada en tiempos de campaña por los actuales Regidores, sobre todo el actual regidor de las juventudes panistas, Ricardo Martínez Cabrales y quién buscará convertirse en Diputado Federal, esa promesa puede esperar para las próximas campañas...Las quejas en contra de los abusos, prepotencia y hasta atracos en despoblado contra los Agentes Municipales en contra de los mismos ciudadanos inermes van en franco aumento, quejas que incluso se agregan las de un grupo de agentes que han sido sometidos a puntos fijos, castigados y reprimidos al grado de suspenderles sus periodos de vacaciones o incapacidades médicas. Las represalias y venganzas personales por cuestiones de color y partido en contra de aquellos elementos que osaron revelarse, voltear a ver otras ofertas y coquetear con los candidatos de un partido político emergente de la esperanza y capitaneado por “ya sabes quién” siguen a la orden del día. En suma el descrédito hacia su policía municipal es un hecho al privar un mal ambiente, del que solo se benefician el Sub Diector Silva y sus cómplices de estas tropelías orquestada como son los Comandantes Jiménez, en el Sector Norte y otros oficiales asignado a la Policía Comercial para cobrar las hora extras en supuestas contrataciones que nunca se comprueban y se manejan con discrecionalidad y abuso…Nadie pone orden en la corporación donde imperan las decisiones políticas, la simulación, un mal ambiente que se traducen en el escaso compromiso de servicio hacia los ciudadanos. Una corporación donde cada quien jala por su lado…El Sindico Municipal Miguel Vila sale de su letargo e invitar a los ciudadanos que fueron afectados en sus derechos por el maltrato, el abuso o las tropelía de Policías Municipales, para que se acerquen en toda confianza a la dependencia a su cargo para formalizar su denuncia y darle puntual seguimiento, o bien ser canalizada a la instancia que corresponda…Los Rosaritenses como siempre, esperan que mejores tiempos llegarán Rosarito… algún día.
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