Ni duda cabe, en la política partidista no importa tener y hacer trabajo permanente con eficacia y eficiencia para poder obtener y conservar posiciones al interior de los partidos, o lograr candidaturas a puesto de elección popular, lo que realmente cuenta para tener lo anterior, es contar con muy buena suerte.
Si lo anterior genera dudas al respecto, solo hay que cuestionar a la exdelegada especial del PRI en la entidad, Nancy Sánchez Arredondo, quien escalo posiciones y logro candidaturas a diputada local, la cual gano por mayoría, al senado de la republica, esa la perdió por escaso margen, y se quedo en el camino de lograr la nominación de su partido a la alcaldía de la capital del estado, Mexicali.
Pero en recompensa a su desplazamiento hacia la candidatura a la alcaldía, su protector político, Fernando (el diablo) Castro Trenti, la colocaron en el liderazgo estatal del PRI para enfrentar el proceso electoral del 2013, del cual salió mal librada al perderse la gubernatura lo que origino que a su mentor el diablo lo vetaran y votaran por la vía diplomática a la embajada de México en Argentina.
Con la derrota por la gubernatura, en el PRI no solo resulto perdedor el diablo Castro Trenti, sino que, sus hijos putativos entre los que por supuesto se integra a Nancy Sánchez, se vieron en la orfandad, sin sentido y sin rumbo político, sin embargo, la suerte acudió de nueva cuenta a su auxilio y hace que el dirigente nacional del tricolor se fije en ella y se encapriche para que continúe manejando las riendas del partido en Baja California.
El caprichoso deseo del máximo jerarca priísta tendrá sus consecuencias, el empecinamiento de Cesar Camacho ha obligado al CEN a inobservar los estatutos y ordenamientos que los rigen a través del delegado Oscar Aguilar, un mediocre que considera que los tricolores bajacalifornianos son tontos y que le creen todas sus estulticias y falacias con las cuales se ha conducido desde su arribo a la entidad.
El haber manifestado que la elección a través de los consejeros políticos era válida ya que estos a pesar de haber concluido su periodo de estadía podían ser prorrogados por el CEN, fue insultar a los priístas del estado, ya que más tardo en decirlo que José Osuna, un serio aspirante (hay de membrete) a obtener la dirigencia estatal de su partido, le corrigió de inmediato, indicándole, que si bien es potestad del comité ejecutivo otorgar la prorroga de permanencia, esta no puede exceder de 90 días, y los consejeros han rebasado su estancia por más de 14 meses.
El empecinamiento de Cesar Camacho para que Nancy Sánchez permanezca en la presidencia estatal del tricolor, ha generado soterradas inconformidades entre los militantes, especialmente entre los hankistas, quienes ven en Nancy un quiste maligno, y a esto se suma la emisión trucada de un remedo de convocatoria que refleja con claridad, que nadie, a excepción de Sánchez Arredondo, se podrá registrar para la contienda a lograr la dirigencia estatal.
La buena suerte generada por el capricho de Cesar Camacho, impulsara a Nancy Sánchez a obtener el liderazgo estatal priísta, sin embargo, esta suerte que hoy la acompaña, mañana no le ayudara a realizar un trabajo de altura como el que requiere ese organismo político para su reorganización, y estructuración necesaria para salir avante en el proceso electoral del próximo año, cuando se renueve la cámara baja del Congreso de la Unión.
La situación apenas inicia, puede suceder que no todos los militantes se sometan y como de costumbre agachen la cabeza y acaten las instrucciones de su máximo dirigente, conforme se acerque el próximo día 17, fecha en que se deberán presentar las formulas que busquen competir por la dirigencia, se revelen los inconformes con el capricho y la buena suerte de Camacho y Nancy, respectivamente.
Lo observaremos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario