TIJUANA.- Ante la falta de un verdadero apoyo por parte de los priistas quienes dieron la espalda a la Impunidad, el gobierno municipal de Tijuana sólo pudo utilizar el acarreo y las amenazas para para defender la corrupción de su Sindico Yolanda Enríquez, en su muestra de desesperación ante el inminente juicio político que se realizará en su contra, a Carlos Bustamante no le quedó de otra que echar mano de recursos públicos para defender lo indefendible.
Desde inicios de esta semana, el Secretario de Desarrollo Social Municipal, David Saúl Guakil, amenazó a sus promotores en colonias, a líderes sociales e incluso a Delegados municipales para que llevaran a todo el que se dejara intimidar, incluso a sus familias, esto ante la falta de un verdadero apoyo a la funcionaria.
Fue así que este 2 de julio en la mañana, alrededor de 80 unidades del transporte público de distintas compañías afines al gobierno municipal, recorrieron las colonias más pobres de Tijuana donde los promotores sociales amenazaron a quienes reciben apoyo del gobierno municipal con acudir a dicha artimaña con tal de simular el supuesto apoyo de esta funcionaria que solapó a un grupo de policías adscritos a la
Delegación de la Presa Rural, quienes obligaron a una joven a tener sexo con ellos luego de que forzaron para que realizara un baile erótico dentro de la comandancia.
No más de mil personas lograron reunir a las afueras del edificio del PRI municipal, donde personal de la Secretaria de Desarrollo Social de Tijuana, “materializó” camisetas y “souvenirs” que repartieron a diestra y siniestra a los concurrentes, la mayoría de ellos, empleados de gobierno municipal, sus familias quienes mostraron su descontento y como siempre las clases vulnerables ante este tipo de manipulaciones. Prueba de ello, es que no destacó ni un sólo personaje que no tuviera ningún compromiso con la actual administración municipal.
Pese a las amenazas del grupo que encabeza David Saul Guakil en el Ayuntamiento de Tijuana, grandes ausencias se observaron en el simulado acto de apoyo, pues no solamente faltó gran parte del gabinete de Carlos Bustamante, también la mayoría de los regidores priistas en el cabildo municipal decidieron no darse el “quemadón” de asistir al evento, inclusive dos de los tres mosqueteros que tiene Bustamante en el Congreso Local prefirieron brillar por su ausencia.
Ejemplo claro de ello, fue que de las 80 unidades de transporte que sirvieron para el “acarreo”, ninguna de ellas fue una de las cientos de calafias con las que cuenta el Diputado Local Gregorio Barreto Luna, quien tampoco acudió a la convocatoria y no prestó una sola de sus unidades para ser cómplice de esta muestra de exacerbada de despotismo mostrada por Carlos Bustamante y su gente.
Luego de este fallido blindaje que quiso montar en escena el grupo afín a Bustamante Anchondo queda claro que el gobierno municipal de Tijuana pese al millonario endeudamiento que no se empachan en lloriquear en cada oportunidad, no tienen la misma consideración para echar mano del erario público para ser utilizados como tapadera a la corrupción de los delitos que cometen quienes tienen sus afectos en las torres de agua caliente. Será necesario que Bustamante y Guakil aclaren de donde salió toda la logística e infraestructura utilizada para proteger a esta funcionaria quien ya siente cosquillas en su cuello al estar a un paso de la guillotina.
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