COLUMNA: Palco de Prensa

* Priístas preocupados
Por Gilberto Lavenánt
En días pasados, prominentes priístas, de quienes se reserva la identidad, debido a la privacidad del evento, reunidos en torno a una mesa, en especial lugar, manifestaban sus preocupaciones por la forma en que, durante los primeros tres meses de su gestión, se ha conducido el Alcalde tijuanense, Carlos Bustamante Anchondo.
“Va a la baja”, advierten, para luego observar que la imagen del priísta, ya no es la del triunfador, en los comicios del 4 de julio del 2010.



Sobre todo, consideran que ha incurrido en un serio error, al no dar a conocer, en forma detallada, con claridad, las condiciones en que el panista Jorge Ramos Hernández, le dejó la administración municipal y a la ciudad en general.



En otra palabras, que para el caso dá lo mismo, observan que Bustamante se está tragando las cochinadas de Jorge Ramos. Que, en un descuido, pronto se considerarán como suyas.



Piensan, y dicen, que es extraña su actitud, el que no se haya atrevido a aclarar las cosas, porque ya los tijuanenses empiezan a ver a Bustamante, como el responsable de los baches y de las deudas que afronta el gobierno local.



Apenas son los primeros tres meses del XX Ayuntamiento de Tijuana, y al interior del Partido Revolucionartio Institucional, ya empiezan a surgir las preocupaciones por las formas en que el equipo del priísta Bustamante Anchondo, está manejando las cosas.



Cuentan, que estos comentarios se repiten, aquí y allá, en algunos casos abundando en los detalles, incluyendo los excesos y fallas de algunos funcionarios municipales, que están usufructuando el puesto público, como si detentaran una franquicia o concesión, pero sin resolver la problemática de su competencia.



Se habla de pugnas internas. Se dice, que hay grupos de poder, que rivalizan y presumen cercanía con el Alcalde, como tratando de ubicarse por encima de los demás. Se barajan nombres como los de Alberto Capella, Antonio Cano, Alcídes Beltrones y varios más.



Se dice también que la encargada del área de comunicación social, Martha Saldivar, no está haciendo ni siquiera un papel decoroso. Que la falta de experiencia y de conocimiento sobre el funcionamiento de los medios, se está reflejando, seriamente.



De la síndico procurador, Yolanda Enriquez, se comenta que no hay día, o semana, que deje de aparecer en los medios de difusión, advirtiendo que ya merito, que esta semana, que la próxima, dirá quienes y cómo, del XIX Ayuntamiento, cometieron irregularidades y las sanciones correspondientes. Como dándole largas a estos asuntos.

Para nadie ha pasado desapercibido, la exhibida que le ha venido dando al Alcalde tijuanense, de manera sistemática y prácticamente como consigna, una televisora local, de cable, señalando, con videos y audios de él mismo, las diferencias entre Bustamante candidato, y Bustamante Alcalde. Dejando en claro que lo que ayer dijo que no, hoy simplemente dice que sí. Y ni siquiera aparece para definir posturas.



No ha podido aclarar, con precisión, por qué antes dijo que Tijuana ya no soportaba más deudas, y a solo tres meses de su gestión, está recurriendo a más adeudos, que algunos quizás entiendan, pero que la mayoría de los tijuanenses están desconcertados por ello.



La adhesión al movimiento contra la tala de árboles, en el llamado parque central Benito Juárez, y por ende la postura del candidato contra el proyecto del Zócalo 11 de Julio, hoy transformada en simpatía por el mismo, es otro tema recurrente en las pláticas entre priístas, algunos de los cuales se pronunciaron en contra de éste, cuando se le acreditaba el patrocinio al gobierno panista de Jorge Ramos.



Recientemente, corrieron rumores en el sentido de que habría reacomodos y cambios en el equipo del gobierno municipal, que Bustamante ya había cubierto compromisos con muchos de sus colaboradores y que no habían respondido como se requiere y que ahora incorporaría a personas de su confianza, a quienes tuvo que relegar. Todo quedó en simples rumores.



Tres meses, quizás sean poco tiempo. Pero la problemática de Tijuana es enorme, variada y requiere de creatividad, recursos, experiencia y voluntad política para enfrentarla. Sin embargo, pasa el tiempo y no cambian las cosas. Ya empiezan a surgir los cuestionamientos. Y las preocupaciones, entre sus propios compañeros de partido.



Lo comentan los priístas, la imagen de Bustamante, va a la baja. El coraje del candidato, no es el mismo que el del funcionario. Bien dicen que “…del dicho al hecho, hay mucho trecho”. Así lo dicen priístas preocupados.



gil_lavenant@hotmail.com