En fechas recientes, representantes de varias agencias aduanales se manifestaron en las oficinas de Ulises Ramírez Loya, propietario de Maval, a quien señalaron de manejar el negocio para la introducción de automotores por las fronteras de Baja California.
Uno de los inconformes que mantuvo el anonimato por temor a represalías, expuso que hay una competencia desleal para el sector, toda vez, que Ramírez Loya, lleva casí dos décadas "pagando piso".
"Administrador de la aduana que llega recibe sus respectivos pagos. Anteriormente se pagaba por la compra de facturas de autos usados. Actualmente el negocio para el dueño de Maval y Dip Leos, consiste en pagos fuertes de billetes verdes, a cambio de la exclusividad para importar vehículos", reveló.
Ante el descontento de los importadores, no se descarta realizar otra manifestación en la empresa de Ramírez Loya, ubicada sobre el bulevar Bellas y Artes, además de acudir a los patios fiscales de aduana de Tijuana para hacer valer su inconformidad.
"Ya nos frenaron una vez para que no fueramos a la aduana. Los inconformes somos muchos y estamos dispuesto a todo. Las amenazas de Dip Leos no nos asustan y de ser posible expondremos la problemática en la Ciudad de México ante la autoridad competente", dijo uno de los afectados.
Cabe señalar que los empresarios del ramo advirtieron que realizarán todo lo que se encuentre a su alcance para terminar con el monopolio del negocio, incluso, hasta solicitar la destitución del Administrador de Tijuana, quien ha sido señalado actos de corrupcion y otros delitos.
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