Fue enfático y soberbio el embajador de México en Argentina, Fernando Castro Trenti, al responder a la pregunta de si existía rompimiento entre él y el ex candidato a la alcaldía de Tijuana, René Mendívil Acosta, al señalar que, solo hay rompimiento entre los iguales, pero nunca con los subordinados.
En su respuesta dejo en claro, que Mendívil Acosta siempre fue un colaborador, un trabajador que jamás llego al nivel y capacidad para igualarse y guardar el estatus de socio que se requiere para establecer acuerdos, pactos y alianzas.
En el marco de una entrevista en el programa de AFN Político, al ser cuestionado sobre su relación con Mendívil Acosta y su distanciamiento o ruptura, el diplomático conocido como "El Diablo”, aunque intento, no pudo ocultar un dejo de soberbia y resquemor al referirse al quien durante décadas a sido considerado su mejor discípulo y fiel seguidor.
Insistente en varias ocasiones respecto a que las alianzas y acuerdos se construyen y se rompen solo entre los similares, entre aquellos que guardan idéntico capital y estatura política, con los colaboradores no hay rupturas, solo separaciones, "El Diablo” dejo entrever su resquemor en contra de quien fue su mejor subordinado.
Y, si ese es el concepto del “Diablo” sobre su mejor colaborador, que pensará del resto de sus seguidores.
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