* "El Kikazgo" descubrimiento del nuevo yacimiento del Panismo corporativo…
* El triangulo de los poderes” Empresarial-político-social crea un estado transfusional, capaz de mutar riqueza y poder privado, sobre dignidad e Institucionalidad política.
* El PAN VIP: Una colonia política en BC dueños de terrenos e inmensas fortunas, privilegiadas a favor de gobernantes como Ruffo Appel, en Ensenada, o ex alcaldes como Jesús González dueño de Cumbres de Juárez, Jorge Ramos Ciudad 2000 y Las palmas, un mega proyecto que destiló capitales incluso de Felipe Calderón Hinojosa, y del extinto José Francisco Blake Mora y, el nuevo descubrimiento sobre Francisco Vega de Lamadrid, candidato a gobernar Baja California por el PAN.
Por Miguel Rojas Salazar
Una red de tráfico de influencias opera en el PAN como instrumento de corrupción protegido por el círculo de gobernantes, equivalente al exclusivismo del PAN o políticos VIP de Acción Nacional en Baja California al servicio de sus candidatos.
Quien provee al partido en abundancia de recursos, es privilegiado para una alcaldía o gubernatura como segura inversión a su riqueza privada, derivado de ese sistema, hoy Francisco Vega de la Madrid, aspira a una gubernatura, presentando como cartas, riqueza y patrocinio, producto de un “saqueo” al pueblo desde la impunidad política y vulnerabilidad social.
La sombra del pasado del Gobernador Osuna Millán, lejos de desaparecer en el presente de Francisco “Kiko” Vega de la Madrid, es más sensible y sin necesidad de sensores “morales“ se detecta una sociedad de capitales entre Panistas de elite , de un “antes” empobrecidos “unidos políticamente” a un “después” enriquecidos invariablemente pero por separación de bienes empresariales.
Las carreras paralelas entre Francisco Vega y José Guadalupe Osuna Millán, nacen con el Ruffismo en 1988, bajo inscripción de miembros activos un año después, en 1989 más por oportunismo que por ideología vocacional y en el 2002 como desertor del PRI, respectivamente.
De ahí se convierten en alcaldes de Tijuana: Primero Osuna Millán de 1995 a 1998 y después Kiko Vega de 1998 al 2001, de aprendices políticos abrían sin escala, experiencia en creación de riqueza, becados a una “maestría” en sus carreras políticas, que ofrecía el PAN del Estado 29 en plena pujanza, hoy desgastado y sin el Panismo central desaforado socialmente y enviado a 3era posición política a nivel Nacional.
Bajo ese sistema, los ex gobernantes de Acción Nacional en fila, desde Ernesto Ruffo en 1989-95, pasando por Héctor Terán, Alejandro González Alcocer por substitución, Eugenio Elorduy 2001-2007, hasta, José Guadalupe Millán, crearon el “yunque” de gobernadores del PAN o circulo exclusivo, desde donde se impone un sello de cacicazgo “político” sobre aspirantes a una alcaldía o gubernatura, seleccionables y rechazados de acuerdo a los niveles de ingresos permisibles a la factura de “inversión”.
El culto a la megalomanía política y expansionismo empresarial, la misma tijera:
Todos han auto rendido culto a su nombre y megalomanía “bautizando” calles, bulevares, escuelas y monumentos, amén de haber incursionado como empresarios en expansión tras sus cargos.
Así, como Ruffo Appel, “decomiso” tierras en Ensenada verbigracia Punta Colonet como interés geo portuario para vender a los Chinos, y expropio otras, para crear el fallido proyecto de la escalera náutica sirviendo como socio activista del PAN e invirtiendo en campañas como la de Vicente Fox y gobernantes en Baja California, después Eugenio Elorduy, vendiendo a Sempra una factura del pueblo y “desalojar” en 2005 al equipo de “Los potros de Tijuana” del estadio de cerro colorado, transgrediendo la ley desde su dictatorial fuero, hoy Francisco Vega, abre otro episodio de impunidad al revelarse que primero como alcalde en 2001 adquirió en ganga predios “triangulando” con agentes inmobiliarios al servicio político, a razón de 5.5 millones de pesos por 10 mil metros cuadrados en Villa fontana sector fronterizo, cuyos asentamientos y polígonos de plusvalía otrora devaluados hoy incrementaron hasta un 300% su valor.
A costa de la propiedad Municipal como “juez y parte” siendo alcalde, Francisco Vega de la Madrid, es una muestra emblemática del oportunismo y red de tráfico de influencias para enriquecimiento privado, haciéndose en su haber, de polígonos, mediante una operación si bien legal, bajo dominio del poder que no reconoce como tal, de acuerdo a la entrevista que editores del semanario zeta fehacientemente dirigieron tras la investigación de la auto venta y auto compra de más de 9 mil metros cuadrados.
Las pruebas son contundentes y hasta cínicas a la vista de cualquier ciudadano que acuda al registro público de la propiedad y comercio, para el candidato panista, solo es parte de impunidad que erosiona la vergüenza resbalando por la calidad moral.
Como ese “monumento a la riqueza” sirviéndose desde la política, Francisco Vega de la Madrid solo es parte de un clan del PAN cuyo único interés de quienes como Ruffo Appel, Elorduy y Osuna Millán, hablan de los proyectos trasnacionales en nuestro territorio es el de la ganancia, sobre la base de utilizar a Baja California como el trampolín para abastecer de energéticos y mercancías al mercado Americano.
En esta estrategia, los gobiernos panistas, Federal y estatal, se asumen como gerencias de paso funcionales a los intereses de las grandes corporaciones. De gobernantes pasan a ser empleados de las mismas, poniendo al servicio de ellas, la información que les brinda su paso por las dependencias públicas. El proyecto para instalar en Punta Colonet un desarrollo portuario e industrial es uno de los ejemplos de esta conducta.
La ruta diseñada por la codicia de la casta panista gobernante, hoy tiene un nuevo nombre donde busca la extensión del poder, antes que el cambio social.
Por esa razón, el hoy candidato del PAN a la gubernatura Francisco Vega de la Madrid, habría cedido el “boleto” a la diputación que en el año 2009, se otorgó al hermano del gobernador, Miguel Osuna, de recién concluida gestión en la legislatura Federal.
La infraestructura corporativa del PAN en BC. Expansión de 24 años
Había que respetar tiempos y decisiones del Osunismo, otra corriente multifuncional procesadora de nepotismo, amiguismo y compadrazgo dentro de la infraestructura corporativa del PAN.
Las fuerzas paralelas entre Kiko y Osuna datan desde la alcaldía en Tijuana, en 1995 primero de José Guadalupe Osuna, después en 1998 la de Kiko Vega, manifestándose el poder Osunista, después la gubernatura a favor de Osuna Millán en 2007-2013 y nuevamente la espera de Kiko Vega, una simetría política en dos cargos que advierten un Osunismo superior, sobre el Kikazgo, relegado por el Osunismo en 2009, pero manteniéndose solo por la vía plurinominal en la sociedad política azul, después un ostracismo y ahora el tercer aire en su carrera política, que depende no solo de su fortuna, sino de salvaguardar el enriquecimiento de sus predecesores y extenderlo, para ello el distanciamiento con el actual Gobernador, Osuna Millán, antes que destruirse se “fusiono” en pro de mantener el gobernato.
La fortuna de Francisco Vega de la Madrid desde el contexto de refutamiento social no parece avergonzarlo, por el contrario, conociendo que ya es dueño de la franquicia a gobernador por su partido, tras presentar su proyecto, su tesiario político y recursos para una costosa campaña, elige a sus amigos y rechaza a sus enemigos dentro del mismo partido.
NO le queda claro aun, que las Corporaciones son para el Pueblo. Pero cuando la transacción es ideológica, cuando el dinero corporativo se alquimiza en ideología corporativa y en éste caso en un Panismo Corporativo, las diferencias cambian para fusionarse.
Alegar una voluntad de emancipación, traer a colación 1989 como el año en que tomamos “conciencia de que éramos Rufistas” y al mismo tiempo escribir la historia local – no ya solo con financiación- sino con metodologías históricas no solo no suena coherente, suena falaz.
Suena a un nuevo tipo de agente que quiere obtener réditos de los dos bandos. Más allá de la contradicción necesaria que se suele invocar, suena a que el Panismo corporativo, se quiere hacer engullir a la comunidad un espejismo histórico – una elegante voluntad de purga – basado en determinados moldes temáticos.
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