Por Gilberto Lavenant
Las ofertas u ofrecimientos especiales, son algo común en materia comercial, en temporadas, épocas o fechas de festejos. Generalmente consisten en descuentos sustanciosos en los precios de determinados productos. La oferta debe ser de tal grado, que resulte atractiva. Básicamente, la intención o propósito es incrementar las ventas y con ello las utilidades. Dicen que nadie está peleado con su bolsillo.
Pero hablar de ofertas atractivas, en materia política, resulta sumamente sugestivo. Esto a propósito de las posibles alianzas entre los diversos partidos políticos, con la intención de garantizar triunfos electorales.
Ha sido una de las fórmulas para lograr ventajas en los procesos electorales. Las alianzas se dan entre partidos que consideran que sólos, corren el riesgo de enfrentar derrotas. Esto ha llevado a establecer alianzas que antes eran impensables, como las del PAN y el PRD. Algo así como “el agua y el aceite”, dicen.
Luego de 24 años, ostentando la gubernatura de Baja California, el PAN ha amenazado con establecer alianza precisamente con el PRD, a fin de evitar que el PRI le arrebate la máxima posición política en la entidad, en los comicios del 2013. Aquí el PRD prácticamente es inexistente, pero bajo la sombra de Andrés Manuel López Obrador, subieron sus bonos como la espuma y ahora presume ser la segunda fuerza política. De ahí la pretensión de los panistas, de aliarse con los perredistas, a los que hasta hace poco les hacía fuchi.
A su vez el PRI, aunque considera fuertes las posibilidades de recuperar la gubernatura, tratando de lograrlo con un amplio margen, busca aliarse con los llamados partidos pequeños, como PVEM, Partido del Trabajo, Panal, Convergencia y Partido Encuentro Social, los cuáles ven “de pérlas” la oportunidad, para “vender caro su amor”, exigiendo posiciones políticas que por sí solos, no lograrían.
El día de ayer, los dirigentes del Partido Encuentro Social, ofrecieron una conferencia de prensa, en Tijuana, para definir su postura hacia los comicios del 2013 en la entidad. En la convocatoria suscrita por el Lic. Rodolfo O. Hernández Bojórquez, Regidor del XX Ayuntamiento de Tijuana y Presidente del PES en esta ciudad, se anunció que los temas a abordar serían las alianzas políticas y elecciones 2013.
Sin embargo, extraoficialmente se dijo que en realidad pretendían destapar al diputado federal priísta Fernando Castro Trenti, como candidato del PES a la gubernatura de Baja California. La versión se tuvo por cierta, toda vez que estaría presente el Dr. Hugo Eric Flores Cervantes, Presidente del CEN del PES y el Ing. Javier Peña García, dirigente estatal.
Algo pasó, porque no hubo el anunciado “destape”. Los dirigentes del PES como que incumplieron el compromiso pactado y apenas si hicieron un tibio pronunciamiento. Manifestaron que estaban analizando la posibilidad de ir sólos en las elecciones del 2013 en la entidad o establecer alianzas que les resultaran ventajosas.
Sin embargo, se generaron múltiples especulaciones, cuando revelaron que se han reunido con Castro Trenti, para discutir la posibilidad de aliarse PES y PRI, y que para convencerlos, el aspirante a la gubernatura les ha hecho una oferta atractiva. No precisaron la dimensión de la misma, pero se presume que se habló de repartirles candidaturas a alcaldes, regidurías y diputaciones.
Lo extraño es que, apenas hace unos días los priístas anunciaron que estudiarían las posibilidades de establecer alianzas con algunos de los demás partidos políticos. En el evento estuvieron Enrique Martínez y Martínez, delegado regional del CEN del PRI, Efrén Leyva, Delegado especial en Baja California y René Mendívil, encargado de la dirigencia estatal del tricolor.
Nadie dijo, entonces, que los aspirantes a la gubernatura estaban en libertad para negociar con dirigentes de las organizaciones políticas ajenas al tricolor, en busca de alianzas y a favor de sus propias aspiraciones políticas. Negociaciones que se supone corresponden a las dirigencias priístas y no a los aspirantes a cargos públicos.
Incluso, ha resultado un tanto extraño, que tales personajes han dado amplias facilidades para que los aspirantes a la gubernatura, promuevan y obtengan pronunciamientos a su favor, tanto de dirigencias de otros partidos, como de organizaciones priístas, como ocurrió recientemente por parte de la Central Campesina Independiente y el Partido del Trabajo, cuyos dirigentes anunciaron que irían en alianza con el PRI, únicamente si Castro Trenti fuese el candidato.
También lo extraño es que ninguno de los otros 6 priístas, aspirantes a la gubernatura, hayan reclamado “suelo parejo”, como lo hicieron los precandidatos panistas a la Presidencia de la República. Pareciera que ya todo está debidamente calculado para que Castro Trenti sea postulado como candidato del PRI a la gubernatura estatal.
El único problema es que el “gran elector” priísta, el mexiquense Enrique Peña Nieto, aún no ha dado la “luz verde” para ello. Además, otro detalle importante, es que Pedro Joaquin Codwell, Presidente del CEN del PRI, se integrará al gabinete presidencial a partir del 1 de diciembre y no se sabe aún quien será el sustituto.
De darse el relevo, como está anunciado, sin duda alguna que el nuevo dirigente relevará a los delegados priístas en la entidad, designados bajo los auspicios de Humberto Moreira, dejando sin efecto los compromisos pactados por los actuales. Es obvio que habrá cambios.
gil_lavenants@hotmail.com
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