MEXICO.- Este sábado para la mañana, el ex diputado federal José Aispuro Torres hizo pública su renuncia al Partido Revolucionario Institucional (PRI) por considerar que el estado se encuentra secuestrado por el grupo político en el poder.
Tras dar a conocer su retiro del tricolor, se espera que este domingo en rueda de prensa las dirigencias estatales de los partidos que conformarán la coalición PAN, PRD, PT y Convergencia le hagan la invitación para que los abandere el próximo 4 de julio en los comicios para elegir al gobernador de Durango.
Dijo que lo largo de su trayectoria como militante priísta a corroborado que tradicionalmente ha existido un espacio de movilización política y social para que sus miembros tengan el acceso a algunos cargos de la dirigencia política y de representación popular.
"Hoy tenemos la posibilidad histórica de cambiar Durango y que los ciudadanos decidan quienes deben de ser sus candidatos, en la actualidad se tiene secuestrado al partido y al estado y éste le da la espalda a todos los duranguenses".
Afirmó que no es lógico ni deseable que un jefe de un grupo político acote a la dirigencia y a su militancia por el solo hecho de querer imponer su voluntad personal y de grupo por encima del legítimo derecho de definir el rumbo de la organización.
Como prueba de ello -aseguró- el ex delegado del PRI en el estado, Jorge Meade Ocaranza, por encima de la misión que tenía de ser un actor imparcial, es quien opera para seguir imponiendo al candidato que sólo es del interés del grupo en el poder.
Estas acciones son conocidas de toda la sociedad, asimismo han impuesto a personas incondicionales como dirigentes de estructuras de partidos y los consejeros políticos; "muchos de ellos ni siquiera reúnen los requisitos estatutarios desplazando a quien tiene una amplia militancia con el objetivo claro y perverso de imponerse en la elección interna".
Dijo que para la designación de candidatos parecer imperar más la descarnada ambición del poder un grupo político que la de mejorar la vida colectiva de los duranguenses.
"Ahora parece que la experiencia estorba y las voluntades feudales se imponen; Durango no puede ser un estado donde prevalezca del poder unipersonal, el aceptar este mecanismo de elección es un retroceso en donde se da la espalda a la militancia, a no transparentar el proceso y contribuye al debilitamiento del PRI", consideró.
Puntualizó "soy un convencido de que la política es una actividad profesional y hacer política es actuar en beneficio de la gente, por lo que escogí el camino de la lucha. La militancia ya no es prioridad y está dejando de ser útil solo por cumplir con los intereses de grupo".
Afirmó que no puede aceptar que quienes tienen secuestrado al partido piensen que la militancia son súbditos de ellos, por eso no aceptó las condiciones en que el PRI quiere resolver las asuntos de carácter político electoral.
Dijo no aceptar que se le haya desplazado y marginado por no pertenecer al grupo del Gobernador y el hecho de participar en el proceso interno sería solo en calidad de un precandidato testimonial obligado a levantar la mano al ganador que cubriría con los intereses mezquinos del grupo en el poder, lo que solo sería una farsa.
Aseveró que ve con tristeza que el PRI esté secuestrado por un pequeño grupo que quiere el poder por el poder para seguir manejando a Durango a su antojo, un pequeño grupo que busca solamente el proteger sus intereses políticos y económicos y a quien no le importa utilizar a los duranguenses para sus propósitos viles.
Debido a que la convocatoria está viciada dijo que de ninguna manera se prestará a la simulación y al engaño que mantiene la dirigencia estatal en contubernio con el grupo en el poder.
Después de dar a conocer su renuncia informó que se iría a su casa a reflexionar y que aun no tomaba alguna decisión entorno a la coalición, sin embargo, trascendió que este domingo estarán algunos dirigentes nacionales de partidos con la finalidad de invitar a Aispuro a que se sume a la alianza opositora.
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