Por Norma L. Vázquez Alanís
En tiempos de crisis la gente recurre a cualquier creencia religiosa o a la práctica de la brujería, el chamanismo, el espiritismo, la astrología y el esoterismo, para sentirse menos desamparada ante la adversidad.
Así lo dijo el periodista José Gil Olmos, de la revista Proceso, quien asistió como invitado especial a la sesión–comida semanal del Club Primera Plana para hablar sobre su libro 'Los brujos del poder', presentado en octubre pasado en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara y que ha sido todo un fenómeno mediático, pues las dos primeras ediciones se agotaron apenas fueron puestas a la venta.
Ante sus colegas socios del Club Primera Plana, a quienes reconoció como "la memoria histórica del reporteo en México", Gil Olmos señaló que el objetivo del libro (Random House Mondadori, 2008) es que la gente tenga información sobre quienes gobiernan México.
Relató que al hacer la investigación de campo y testimonial sobre las brujerías de Elba Esther Gordillo y Marta Sahagún, se dio cuenta que la práctica de creencias en lo sobrenatural se remontaba, en México, a tiempos de Francisco I. Madero; descubrió también que este tipo de procedimientos se daba a escala internacional.
El libro es un ejercicio para descubrir el poder, dijo Gil Olmos, quien actualmente trabaja materiales especiales para el semanario Proceso, pues algunos de los miembros de la clase política han recurrido a las fuerzas sobrenaturales para tomar decisiones que influyen en el rumbo de México.
Su trabajo de investigación trata de documentar quiénes son los políticos que basan sus determinaciones en este tipo de artificios, y es que no pocos de ellos han intentado usar la magia en su propósito de conquistar el poder.
Adelantó a los socios del Club Primera Plana que va a hacer una segunda parte del libro que se convirtió en un best seller tanto por el morbo de la gente por saber que la dirigente del SNTE gasta mucho dinero en los "trabajos" de brujería, como por la serie de cinco reportajes sobre su obra, que hizo Televisa.
Gil Olmos, quien se ha dedicado al periodismo de investigación desde hace dos décadas, comentó a sus colegas que lo más increíble de su búsqueda fue descubrir que Marta Sahagún, siendo católica de cepa pura y tesorera durante mucho tiempo de los Legionarios de Cristo, practicara la santería y los ritos de los "mayas intergalácticos", corriente esotérica que considera a los mayas de origen extraterrestre y viajeros en el tiempo, a la cual pertenecía su publicista Santiago Pando.
Dicho caso fue el que más le impactó de la investigación que hizo para 'Los brujos del poder' (recién publicado por Debolsillo, ediciones económicas de Random House Mondadori) y que le llevó un año, porque Sahagún abrió las puertas de Los Pinos a este tipo de ritos, los cuales se practicaban cotidianamente.
Además, porque demostró lo endeble que es la seguridad en la casa presidencial, pues la señora Sahagún le daba todos los días gotas de algo en el café y los jugos a Vicente Fox, sin que el Estado Mayor Presidencial interviniera; tampoco impedían la realización de los ritos de santería y de los mayas intergalácticos en los jardines de Los Pinos.
Interrogado sobre si ha recibido reclamos por el contenido del libro de parte de los personajes que menciona, dijo que nunca recibió amenaza alguna, pues abordó esta faceta de la vida de los políticos sin ofender su privacidad, precisamente para evitar persecuciones en estos tiempos tan peligrosos para el ejercicio periodístico.
Gil Olmos dijo que en cierta entrevista Elba Esther Gordillo aceptó ya saber que existía un libro donde se le señalaba como santera, mientras que en el caso de Sahagún la agencia española Efe habló a su oficina y dijeron que no harían ningún comentario al respecto. En cambio Raúl Salinas de Gortari le habló por teléfono para ponerse a su disposición a fin de que lo entrevistara acerca de la famosa Paca.
Consideró el autor de 'Los brujos del poder' como peligroso que los gobernantes de México sigan acercándose a la brujería, el ocultismo, el chamanismo o la santería para decidir el rumbo del país; estimó que el 80 por ciento de los políticos mexicanos practica la brujería o cree en fenómenos religiosos como Malverde, San Judas Tadeo o la Santa Muerte.
Bien sabido es, dijo Gil Olmos, que los políticos del PRI acudían con chamanes o iban con María Sabina. Recordó que presidentes como Francisco I. Madero, Plutarco Elías Calles y Miguel Alemán acudieron a lo sobrenatural para ejercer el poder, ya que practicaban el espiritismo.
Finalmente, el periodista de Proceso comunicó a sus colegas del Club Primera Plana que entre sus proyectos editoriales está la segunda parte de 'Los brujos del poder' y un libro sobre el conflicto en Chiapas, puesto que durante varios años estuvo encargado de cubrir esa información para su revista.
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