COLUMNA: El Chicotito

No conocen la vergüenza, menos el significado de la palabra. Solamente saben gastar y, otros, administrar el oneroso sueldo mensual que perciben mensualmente en el recinto de San Lázaro en la capital del país.
Excepto uno de ellos, el resto de ellos viven días de ignominia.

Se trata de los diputados federales del Partido Acción Nacional (PAN) que en dos años no han arrojado beneficios para la población y el estado. Por el contrario, al igual que todos los legisladores del país, son un lastre, una loza para los mexicanos y para el erario.
Sépase que cada legislador gana 182 mil pesos al mes. Sí, nada más y nada menos que esa exorbitante cantidad por acudir a calentar la curul y levantar el dedo durante las sesiones del Congreso de la Unión.
Insistimos, salvo un caso, la mayoría de ellos son mediocres, improductivos y cínicos.
Algunos de ellos deben vigilar que se cumpla las leyes, pero en los hechos fomentan la violación de las mismas.
Es el caso del diputado federal del PAN, Antonio Valladolid, quien intercedió ante el gobernador José Guadalupe Osuna Millán, para que su asistente de nombre Manuel fuera puesto en libertad por la procuraduría estatal.
Y es que en días recientes el asistente del legislador federal fue detenido con ¡un auto robado! Las gestiones del diputado arrojaron resultados y pusieron en la calle a su querido Manuel.
Otra “perla” legislativa es el torpe, Ricardo Franco Cazarez, diputado federal. Este diputado además de llevar uno de los mejores “records” de inasistencias, ahora representa los intereses oscuros de un grupo de vendedores de autos “chocolates” que operan en la Zona Este de la ciudad.
Franco pretende crear una “megayarda” , en el centro de espectáculos Alamar, para que allí se venden todos los vehículos irregulares que se ofrecen en la vía pública en las colonias Buenos Aires Sur, Norte, Mariano Matamoros y Florido.
Muchos se preguntan ¿por qué ahora el legislador representa estos intereses? ¿Qué acaso no sabe que la mafia está detrás de los vendedores de autos “chocolates”? O ya lo sabe y por eso trabaja…perdón los asesora.
Una “joyita” más es el diputado mexicalense, David Maldonado, presidente de la Comisión de Energía de la Cámara de Diputados, quien lejos de brillar con el tema de la reforma energética, es uno de los más grises. Bueno ni siquiera su nombre apareció en los debates sobre el tema.
Pero eso sí, David Maldonado, el protegido del Yuyín Elorduy, se la pasa haciendo negocios desde su curul. No pierde la oportunidad para servir de enlace y de gestor de grandes empresarios que acostumbran a realizar negocios con los gobiernos de los estados y municipios.
Uno de ellos es la empresa concesionaria de la construcción del Acueducto.
Por cierto, en los pasillos del Palacio Municipal, El Chicotito frecuentemente se encuentra a Bernardo Martínez Aguirre, ex secretario de Gobierno del Estado y socio de David Maldonado, en una empresa de consultoría.
El motivo de la presencia de Bernardito –dicen--, es que es asesor de Cemex en Tijuana y de otras grandes empresas. Ya salió el peine.
Desde que Fernando del Monte, ex candidato del PRI, a la presidencia municipal, llegó a la coordinación regional de comunicación del Panal no se ha realizado bien su labor, ya que hasta la fecha prácticamente no ha mandado un solo comunicado, y si en cambio, se ha dedicado a trabajar en su proyecto político personal, que es lograr una diputación federal.
Ese objetivo lo va a tener difícil, toda vez que el magisterio no lo quiere, ni los trabajadores de la educación de la sección 2, ni los de la 37. Cuentan que desde que asumió su actual cargo, no se ha tomado la molestia siquiera de visitar algunas de las 5 oficinas que el Panal tiene en el estado, mucho menos difundir el trabajo del partido, pues anda muy ocupado en su proyecto personal. (enlineatijuana.com).