Por Alfredo Calva.
Si hay un personaje que embone a la perfección al director de Comunicación Social del XXIV Ayuntamiento de Tijuana, Miguel Ángel Torres Ponce, es sin duda alguna, Tartufo, quien enfundado en su narcisismo e hipocresía saca el mayor provecho económico de su posición gracias a la miopía y pasmosa parsimonia política de la alcaldesa Montserrat Caballero Ramírez, quien creyó que Torres Ponce podría ayudarle a catapultarse como un activo político relevante que llegaría sin problema alguno a la elección consecutiva con éxito.
Es incomprensible el hecho de que, ante la debacle de imagen y credibilidad que viene registrando ante la opinión pública la edil continúe teniendo como su consigliere a un incapaz, ineficaz e ineficiente operador de medios como su director de Comunicación Social, la caída en la aceptación ciudadana de la alcaldesa que han mostrado las encuestas indica y demuestra la fracasada labor que viene realizando Torres Ponce en torno a la figura de Caballero Ramírez.
Encuestas que, si bien es cierto la colocan como la presidente municipal mejor evaluada (51 por ciento) de acuerdo con el estudio demoscópico de Plural.Mx en la entidad, esto no es sinónimo de que los ciudadanos consideran como aprobada su gestión gubernamental, especialmente en el tema de combate a la inseguridad.
Prueba de ello es, cuando se les pregunta a los ciudadanos si quisieran que fuera a la reelección, la respuesta positiva no alcanza ni el 30 por ciento de los entrevistados, en otras palabras, en estos momentos a Montserrat Caballero los tijuanenses no aprueban su gobierno y la mayoría no la quieren de nuevo como alcaldesa en el 2024.
Por lo anterior, es un grave error político de la alcaldesa de Tijuana mantener a su lado al Tartufo que no ha podido, ya no revertir, sino detener la pobre percepción que prevalece entre sus gobernados sobre su administración y en especial, la andanada de ataques mediáticos que a través de sus empresas de comunicación el senador, ahora del PT, Jaime Bonilla, realiza diariamente sobre su gestión y persona, lo que contribuye a socavar de forma constante su imagen y credibilidad pública ante los tijuanenses.
Y en este caso específico, a la ineficacia e ineficiencia que es natural en Torres Ponce, la primer edil deba de adicionar al total de ineptitud que representa este para su consideración y análisis lo que se murmura en los pasillos de Comunicación Social de su gobierno, que es un caballo de troya del legislador federal que a través de su inacción e información que le brinda, se encuentra resarciendo la deuda que guarda con él por las malas cuentas con que resultó cuando Bonilla puso en sus manos la administración de la estación Radio Formula en Mexicali y, que empezó a cubrir desde que lo designo titular de Comunicación Social en el congreso del estado en la XXIII Legislatura cuando Bonilla era gobernador.
De ella depende detener su descenso y buscar revertir el daño ocasionado. No hay peor sordo y ciego, que el que no quiere ver y escuchar.
Cotilleo político….
Los altoparlantes del senador del PT Jaime Bonilla, festejan como mascotas desbocadas lo que su oligofrenia les hace creer que fue un gran triunfo político de su pastor sobre el diputado federal, Armando Reyes Ledezma, de lo que en realidad es una victoria pírrica que se evidenciará en el proceso electoral del año próximo.
Y mientras tanto….
En Playas de Rosarito en cuanto trascendió que la corcholata de Morena Claudia Sheinbaum, viajará a Ensenada de visita familiar, lame botas alistan a sus borregos para acudir al puerto a manifestar su respaldo a la futura candidata a la presidencia para que los tenga en consideración y en su momento les arroje un hueso revestido de candidatura a cualquiera de los cargos que estarán en juego el 2024.
Presiona la imagen y...
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