En política, el futurismo es una constante. Todo político, apenas asume un cargo público y ya está pensando en el que podría asumir en un futuro próximo.
Obviamente, todos sueñan algún día convertirse en el primer mandatario del país, en Presidente de la República. Total, soñar no cuesta nada.
Para alcanzar los sueños, todo político debe prepararse. Básicamente capacitarse en todos los temas de administración pública. De manera específica, los que reclame el perfil del cargo público más inmediato, en sus aspiraciones personales.
De las posiciones más difíciles, la más anhelada, y la que mayores dificultades plantea, es la Presidencia de la República.
La principal dificultad, es lograr el reconocimiento y aceptación de todos los mexicanos. 125 millones 915 mil 713, según los reportes más recientes.
Para lograr ese alcance, se requiere ostentar un cargo público, que permita recorrer el país, o tener mucho dinero, para viajar y contar con un equipo de colaboradores y asesores. No es cualquier cosa.
A fines del pasado mes de agosto, la empresa consultora Mitofsky, hizo una encuesta interesante, para tratar de observar el posicionamiento de los principales políticos mexicanos, que podrían contender en las elecciones presidenciales del 2018.
Aún falta mucho tiempo para ello, pero esta es una carrera especial, que se requiere iniciar con mucha anticipación. El período del proceso electoral, es extremadamente corto.
Por ello, resulta interesante, observar en qué posición se encuentra, cada uno de los posibles aspirantes.
En primer lugar, aparece Andrés Manuel López Obrador, quien ya participó en dos contiendas presidenciales. El tabasqueño, de 63 años de edad, fue candidato a la Presidencia de la República en los comicios del 2006, y seis años después, en el 2012, por la Coalición Movimiento Progrrsista, formada por el PRD, PT y Movimiento Ciudadano.
En el 2018, pretende contender, representando a su partido, Movimiento de Regeneración Nacional, mejor identificado como Morena. De hacerlo, sería el candidato con mayor experiencia en la materia. El que mejor conoce al país y por lo tanto el más conocido.
Además, para muchos, es el candidato ideal, en un país con 24.6 millones de personas que carecen de ingreso suficiente para adquirir la canasta básica de consumo. En términos generales, aproximadamente el 50% de los mexicanos, son pobres. En la mayoría de ellos, hay un sentimiento de reclamo y decepción hacia los gobernantes mexicanos. Lo que se refleja en un repudio general hacia los políticos en general. Por ello, surge la corriente de los candidatos independientes.
En segundo lugar, aparece Miguel Angel Osorio Chang, Secretario de Gobernación. El hombre de confianza del Presidente Enrique Peña Nieto. Aunque aparece en un lugar privilegiado, en cuanto al conocimiento, por parte de la población mexicana, la verdad es que, políticamente hablando, por el lugar que ocupa en el gobierno federal y las responsabilidades que ello implica, es uno de los funcionarios más desgastados, del equipo de Peña Nieto.
Irónicamente, el tercer lugar lo ocupa Luis Videgaray, titular de la Secretaría de Hacienda, a quien muchos mexicanos, en especial los fronterizos, lo culpan por su angustiosa condición económica. Gran parte de esa proyección negativa, la logró al establecer la homologación del IVA, que representó su incremento del 11% al 16%. Seguramente, ningún bajacaliforniano votaría a su favor, si contendiera por la Presidencia de México.
La cuarta posición, la ocupa Miguel Angel Mancera, jefe de gobierno del Distrito Federal, quien efectivamente aspira por la silla presidencial. Su posición está en duda, por la marcada fragmentación de las izquierdas. El puesto que desempeña, ha sido excelente para proyectarlo a nivel nacional.
En quinto lugar, aparece Margarita Zavala, esposa de Felipe Calderón, quien recientemente anunció que iría por la posición presidencial. Su problema, es estar casada con uno de los peores Presidentes de México. A quien muchos panistas acusan del desplome del PAN.
En sexto lugar, Eruviel Avila Villegas, Gobernador del Estado de México, quien daría cualquier cosa, por suceder a Peña Nieto en la Presidencia de México, al igual que lo hizo en la gubernatura de su entidad. En su zona local, ha logrado una magnífica proyección. En el resto del país, prácticamente es un desconocido.
En séptimo lugar, aparece Jaime Rodríguez Calderón, “El Bronco”, que apenas hace unos días asumió la gubernatura del Estado de Nuevo León, luego de lograr la hazaña de vencer a los candidatos del PAN y PRI. Ha dicho que la Presidencia de México, no le quita el sueño, pero que si las condiciones le permitan esa opción, se preparará para ello.
En el octavo lugar, se ubica a Gustavo Madero, expresidente nacional del PAN y con una pésima imagen como tal. Lo acusan de haber logrado los resultados electorales más pobres de los últimos años. Ni los panistas votarían a su favor.
En el noveno lugar, Manlio Fabio Beltrones, dirigente nacional del PRI y esperanza de muchos priístas. El reto es enorme.
gil_lavenants@hotmail.com
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