Por BEAM
La actitud de algunos medios de comunicación mexicanos y de sus
columnistas tras los primeros 45 días de gobierno de Enrique Peña es más
que lambiscona. Es vergonzosa.
Si hiciésemos caso de los gorjeos de estos tipos de Milenio y
Televisa, el inicio de gobierno de Peña ha sido demoledoramente exitoso y
prístino. Poco falta para que lo declaren el mejor presidente mexicano
desde Juárez y Lázaro Cárdenas. O en una de esas, hasta nos dicen que
estos dos íconos patrios no le llegan ni a los talones al mexiquense.
Sin embargo, acá en el “mundo real”, la situación es radicalmente diferente.
Más allá de discursos y “pactos” que son letra muerta, los mexicanos
sufren a diario, como ha sido la regla durante el PRIANato, de
inseguridad, gasolinazos, falta de atención a los padres y familiares de
los desaparecidos de Calderón y problemas económicos.
Lo único que ha cambiado en el gobierno de Peña, al momento, es el precio de la gasolina… en dos ocasiones.
Dirán algunos, con cierta razón, que mes y medio de gobierno son
insuficientes para que Peña de resultados. Sin embargo, con tales
alabanzas, parecería que EPN hubiera logrado aquella bravata de Vicente
Fox de resolver problemas en “cinco minutos”.
Por otra parte, pifias como el olvido del significado del IFAI
y su declaración de que Benito Juárez fundó Hidalgo en !1969! nos
muestran las limitaciones de un político sumamente sobrevalorado.
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