Chamaqueado, burlado y ninguneado, se sintió el viejo líder transportista Alfredo Amaro Mata quien hoy muestra un rostro desencajado, marchito. Esto al recibir en un palmo de narices, la negativa de su registro como precandidato a Diputado por el XVII Distrito de Playas de Rosarito, por parte de quienes integran la comisión interna de su partido el PRI. Ni la ida hasta Mexicali y la movilización de tanta gente.
Muy aparte quedaron sus casi 50 años de priísta, de poco sirvió su trabajo de servicio a la comunidad de toda la vida, menos su lealtad al sector obrero al que ha pertenecido y librado tantas batallas al lado de Roberto Luévano Aguayo, de Salvador Aguirre o su compadre Eligio Valencia. Tampoco sirvió ser muy casi el abuelo postizo del alcalde Javier “Tito” Robles Aguirre, a quien le ayudó a ganar la presidencia cuando juntos le arrebataron la candidatura al otro Javier Hernández Tovalín. Pero esa, es otra historia. Siempre un soldado de su partido al lado de gobernadores, dirigentes nacionales y hasta de presidentes. Y es que el septuagenario político empírico, hace unas semanas se festejó su cumpleaños donde dio de comer a más de dos mil personas allá por el Cañón Rosarito. En ese entonces, envalentonado con unas Coors y con el ritmo del conjunto norteño, al folklórico personaje se le oyó decir que buscaría un cargo de elección popular porque ya le tocaba, que al cabo que tener escuela o estudios no es tan importante para servir a la gente. Además de que prueba de ello son muchos funcionarios que con todo y sus estudios universitarios no más no pelan un chango a nalgadas y dijo nombres…Que la buscaría a como diera lugar para que de una vez le hiciera justicia su partido. En caliente ni se siente. Incluso a su estilo, el populachero dirigente le dijo a Mauricio “Güicho” Aguirre que se abstuviera “no tú espérate que yo estoy más cerca del hoyo que tú y, pues ya me toca”, dijo esbozando una sonrisa como de niño. Hoy en día, quienes mueven el pandero en eso de las candidaturas, en donde el mismísimo Fernando “Diablo” Castro, se encaprichó a su vez para aceptar única y exclusivamente el registro de la Maestra en Antropología por quién sabe qué universidad y también hotelera. Hija de un ex alcalde tildado de panista por la propia raza maledicente del tricolor partido. Laura Luisa Torres. En respuesta Amaro Mata amagó con tomar el PRI pero eso no dice nada, el daño ya estába hecho. Aquella noche triste Amaro no soportó más, y lloró amargamente para sacar su dolor.
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