* GRACIAS A SU CAMPAÑA EN CONTRA DE AMBAS; LOGRÓ QUE SE RECONCILIARAN.
Por Sergio Anzures.No cabe duda que Jaime Bonilla es un político a quien le gusta unir a la gente, sobretodo a aquellos que por una u otra razón han tenido diferencias.
Por ejemplo cuando era gobernador de Baja California unió a empresarios en su contra, por la intención de pretender expropiar el Club Campestre de Tijuana, cuyo decreto se publicó en abril del 2021.
Todavía como gobernador y al intentar quitar la administración y operación del agua a la CESPT para transferirla al municipio, generó se estableciera la relación política entre el diputado federal Arturo González Cruz y la gobernadora electa Marina del Pilar Avila.
La noche del 28 de septiembre del 2021, el Congreso del Estado aprobó el regreso de Arturo González Cruz como presidente municipal de Tijuana, para concluir su periodo de gobierno de dos años.
En sesión extraordinaria, la XXIV Legislatura aprobó el acuerdo de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO), para dejar sin efectos a su vez, el acuerdo del 12 de febrero de este año, mediante el cual se otorgó una licencia definitiva a González Cruz para abandonar su encargo como presidente municipal, y dejar en su lugar a Karla Patricia Ruiz Macfarland como suplente.
Con esta aprobación, se resolvió la inmediata incorporación de González Cruz como presidente municipal de Tijuana, y se ordenó dar aviso de ello a las diversas instancias.
Tras su regreso de un día y medio como alcalde de Tijuana, en sesión de Cabildo el 29 de septiembre del 2021, se aprobó la revocación del acuerdo de decreto que autorizaba la transferencia del sistema de agua potable, drenaje y alcantarillado del gobierno del estado al municipio de Tijuana.
Y se eliminó la aprobación de la empresa paramunicipal Comisión del Agua de Tijuana, por lo que se dió un golpe político al entonces gobernador Jaime Bonilla Valdez.
Desde esa fecha, la relación política entre la gobernadora Marina del Pilar y el diputado federal Arturo González es buena.
Esa operación del agua al municipio la pretendía dejar Jaime Bonilla a su aliada en ese momento, la nueva alcaldesa de Tijuana, Monserrat Caballero Ramírez.
Incluso eso generó las diferencias entre Montserrat Caballero y la entonces gobernadora electa Marina del Pilar Ávila.
Diferencias que se acentuaron desde esa fecha y que prácticamente han quedado atrás, claro gracias al senador Jaime Bonilla.
Desde que antes que Marina del Pilar rindiera protesta como gobernadora, desde sus medios de comunicación, Bonilla Valdez ya traía campaña en contra de la política mexicalense.
Luego empezó contra Morena, se fue al PT, cuyo partido quiere controlar en Baja California y desde donde ha intensificado sus ataques contra la gobernadora y en últimas semanas contra su ex aliada Montserrat Caballero Ramírez.
Y es que se asegura que Jaime Bonilla a través de enviados hizo recomendaciones y solicitudes a Montserrat Caballero, quien no hizo caso.
Las diferencias se fueron acentuando por los ataques en las llamadas Jornadas por la Paz contra Montserrat Caballero, quien no quería contestarle, pero todo llegó al límite y ahora no sólo respondió a Bonilla Valdez, sino que hizo alianza con la gobernadora Marina del Pilar Ávila.
La mandataria estatal le dió todo su respaldo públicamente a la alcaldesa de Tijuana contra la campaña implementada del llamado tóxico.
Es decir, gracias a Jaime Bonilla, las diferencias entre gobernadora y alcaldesa quedaron atrás.
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